Un hombre de apellidos Montero Víquez fue condenado a 372 años de cárcel, al ser encontrado culpable de 51 delitos sexuales en contra de sus tres hijos.
Según informó el Ministerio Público este viernes, por medio de un comunicado de prensa, los delitos fueron cometidos entre el 2002 y el 2013 cuando fueron denunciados.
Cuando los ataques comenzaron, la hija mayor de Montero tenía solo nueve años. Ella fue violada por el papá en 15 oportunidades, abusada 12 veces y obligada a ver pornografía en siete ocasiones.
En el 2004, cuando otra hija tenía cinco añitos, el enfermazo la violó seis veces y enseñó imágenes pornográficas en ocho oportunidades. Por si fuera poco, en el 2011 cometió tres delitos de difusión de pornografía en perjuicio de su hijo varón, un adolescente que tenía 15 años.
Ataca en la casa
Según demostró el fiscal a cargo del terrible caso, el abusador cometía los delitos en su casa. Él aprovechaba cuando la mamá de los menores salía a trabajar y cuando ella dormía durante las noches para cometer los delitos.
La familia vivía en una casa muy pequeña, por lo que la niña menor tenía que dormir en la cama de los papás y eso facilitaba los abusos sexuales contra ella.
LEA MÁS: Papá condenado a 100 años por violar a su hija
En el 2013, la mamá de las víctimas se dio cuenta de la situación y puso la denuncia en la Fiscalía. Actualmente las hermanas afectadas tienen 19 y 25 años, mientras que el varón tiene 22.
El juicio contra el sujeto se llevó a cabo en los Tribunales de Heredia, los días 19 y 20 de marzo y 10 y 12 de abril.
Luego de que los jueces declaran a Montero culpable y le metieran ese montón de años, le dictaron prisión preventiva mientras la sentencia queda en firme.