Ninguna condena le dará consuelo a los familiares de Gerardita Agüero Fallas, de 53 años, y de su hija Génesis Mariana Navarro Agüero, de 13 años, quienes fueron asesinadas a balazos.
El responsable de las muertes es un hombre pensionado identificado como Vinicio Angulo Araya, de 65 años, quien el pasado viernes aceptó la culpa y con eso evitó la etapa del juicio.
El sujeto se sometió a un proceso abreviado en el Juzgado Penal de la zona y de inmediato recibió una condena de 50 años.
Gerardo Solís, hijo de Gerardita y hermano de Génesis, afirmó que la sentencia que le impusieron al tipo no les da ningún consuelo.
“Para mí las leyes de Costa Rica son una basura, él más bien recibió un premio porque será atendido en la cárcel, mientras nosotros debemos seguir cargando con el dolor de la perdida y el pago de los impuestos. Además, este hombre traspasó las propiedades que tenía para no hacerse responsable de los daños que ocasionó, como quemar dos carros”, expresó Solís.
El familiar agregó que nunca volvieron a tener paz y cada mes extrañan más a sus parientes.
La investigación estuvo a cargo de la Fiscalía Adjunta de Cartago, quienes lo acusaron de los delitos de femicidio, homicidio simple, tentativa de homicidio, incumplimiento de medidas de protección, maltrato, daños e incendio.
Angulo y doña Gerardita habían convivido por dos años, pero la relación terminó consecuencia de la violencia que sufría la mujer.
Ellas murieron el lunes 3 de diciembre anterior en la casa en la que vivían, en Carrizal de San Pablo de León Cortés, luego de que Angulo se obsesionara y persiguiera a la víctima por un mes, pese a tener medidas para no acercarse.
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El sujeto disparó contra doña Gerardita once veces y a la adolescente le dio un tiro en la cabeza. Además, el Ministerio Público probó que Angulo le apuntó al dueño de la propiedad; sin embargo, el arma no se accionó.
Asimismo, el sentenciado, antes de huir, roció un acelerante en dos carros que había en la casa y les prendió fuego. Luego se marchó del lugar, los vehículos eran de Gerardita y de la pareja que tenía en ese momento. Horas más tarde, el hombre se entregó a las autoridades policiales.
Actualmente está en prisión preventiva mientras la sentencia queda firme.