Bryan Alvarado Espinoza, de 29 años, el joven que murió como consecuencia del choque de dos buses en la autopista General Cañas, es recordado como si fuera un ángel. Así lo dijo Edwin Zúñiga, quien viajaba con la víctima en el mismo bus.
"Ya estábamos por bajarnos y le dije 'Bryitan bájese', pero como él siempre fue tan servicial me dijo que lo hiciera primero yo, lo hice y treinta segundos después ocurrió el choque, aún recuerdo el fuerte estruendo, hasta ese momento no sabía lo que pasaba", expresó Zúñiga.
Asegura que en ese momento no sabía que Bryan estaba tirado en la cuneta debajo de las palmeras, hasta después fue que escuchó y vio cuando la gente lo ayudaba a salir.
"A mi era el que me tocaba morir; sin embargo, Bryan me dio el campo para bajarme a tiempo, él sacrificó su vida", expresó el compañero de trabajo de la víctima.
Agregó que él y su esposa lo recuerdan como un ángel, por ese acto que hizo antes que ocurriera la fatalidad.
"Esta tragedia me impactó mucho, porque alguien se sacrificó por uno, a todos nos ha dolido su muerte. Tengo una hija, mi esposa y yo hablamos que Bryan permitió que yo siguiera viendo a mi chiquita crecer. Él tenía la costumbre de llegar temprano al trabajo y siempre trataba de agarrar el bus temprano", manifestó Zúñiga.
Bryan sufrió el accidente el jueves 10 de mayo anterior a las 5:40 a.m., cuando iba para el trabajo, falleció al día siguiente en el hospital México.
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La vida de Bryan, siempre estuvo marcada por la tragedia, pero demostró ser un guerrero. Por ejemplo, el día que nació murió uno de sus hermanos trillizos y cuando tenía 12 años sus papás fallecieron. Su madre murió de leucemia y su padre se quitó la vida debido a la depresión por perder a su esposa.
El Ministerio Público está a la espera del informe judicial y con base a los resultados los abogados de la familia, Daniel Vega y Alfonso Ruiz, presentarán una demanda.