Sucesos

Chito Pata Pelada concilió con dueño de perros que casi lo matan

El deportista quedó muy nervioso y se asusta cada vez que ve un guato en la calle

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"Un tatuaje barato", así le llama el atleta "Chito Pata Pelada" a las cicatrices que le quedaron en las piernas y los brazos, luego de sobrevivir al salvaje ataque de tres perros, mientras corría en Getsemaní de San Rafael de Heredia.

Luis Gerardo Ramírez Chaves, de 71 años, así se llama "Chito", la vio bien fea hace tres meses, cuando sufrió la agresión.

Actualmente está muy bien de salud y pudo volver a su pasión: correr, pero nos contó que está como traumatizado, porque cada vez que ve un perro, corre más rápido, pero por el miedo de sufrir otra embestida.

"Quedé muy nervioso, me asusto cuando veo un perro, es inevitable no recordar todo lo que pasé, esa vez por un momento creí que estaba perdido", expresó el deportista.

Luis Gerardo Ramírez Chaves, de 71 años, conocido como "Chito Pata Pelada" le agradece a la vida por permitirle seguir corriendo. Foto: Cortesía

Chito llegó a una conciliación con el dueño de los animales, un hombre de apellido Montes, para evitar llevar el caso a juicio.

En apariencia, Montes le dijo que solo podía pagar unos ¢500 mil, pues no tenía más dinero para cubrir los cuidados que necesitó el atleta para la recuperación.

Este dinero el atleta lo debe recibir el viernes 4 de mayo, en el Centro de Conciliación del Juzgado Convencional de San Rafael de Heredia.

Don Luis tiene 71 años y es aficionado al atletismo, en enero anterior pensó que iba a morir al ver tres perros encima de él. Foto: Archivo

Chito le agradeció a todas las personas que le ayudaron a curar las heridas, ya sea de manera monetaria y con oraciones, por eso quiere devolver todo ese apoyo aportando en una obra benéfica en la Ciudad de las Flores.

Menciona que se siente agradecido de seguir con vida y disfrutar de correr con el pie descalzo. Sin embargo, no volvió a pasar por la zona donde fue atacado por los animales.

A Chito no le mordieron la cara porque metió los brazos y las piernas. Foto: Cortesía

El deportista es vecino de San Josecito, en San Rafael de Heredia, el día del ataque había salido de la casa a las 6 a.m. con la intención de correr unos 20 kilómetros, pero solo avanzó unos cinco kilómetros cuando fue mordido.

Asegura que nunca más volvió agarrar por esa ruta, por miedo de no salir bien librado en una segunda ocasión.

El deportista perdió mucha sangre por las lesiones, pero tres meses después está en buenas condiciones. Foto: Archivo
Alejandra Morales

Alejandra Morales

Bachillerato en Periodismo en la Universidad Internacional de las Américas y licenciada en Comunicación de Mercadeo en la UAM. Con experiencia en temas de sucesos y judiciales.

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