Una niña de 8 añitos que resultó herida de gravedad en un choque que ocurrió en Guácimo, Limón, sigue luchando por su vida y ya abrió los ojitos.
El accidente fue este lunes por la mañana. El carro en el que viajaba la pequeña junto a sus papás –Osvaldo Rojas Rivera e Irene Martínez Ramírez, ambos de 29 años– chocó de frente contra un cabezal. En el auto iba también una niña de 3 años, hija de la pareja.
La familia fue llevada al hospital de Guápiles, sin embargo, la condición de la niña de 8 años empeoró, así que ese mismo día la llevaron de emergencia al Hospital Nacional de Niños.
“Le están haciendo exámenes, pero no puedo dar muchos detalles de ella. Mi hermana me contó que la niña ya abrió los ojitos un poquito y eso lo vemos como una buena señal, pero tenemos que esperar por el resultado de los exámenes”, contó Vanessa Ramírez, hermana de Irene.
En cuando a su hermana Irene, Vanessa dijo que solo sufrió una lesión en un tobillo y le dieron la salida pocas horas después, algo que Irene aprovechó para viajar a San José y estar cerca de su hija.
“Mi cuñado todavía está en el hospital de Limón y de ahí lo van a llevar al Hospital del Trauma del INS, por las quebraduras que sufrió en las piernas y en la muñeca izquierda”, detalló Vanessa.
Un rasguño
Vanessa contó que lo que más les ha sorprendido es que le pequeñita de 3 años prácticamente salió ilesa del terrible accidente. Únicamente sufrió un rasguño en la frente y de momento la cuida la abuela paterna.
“En el momento nos sentimos muy mal porque se decía que la niña (de 8 años) había muerto, pero gracias a Dios no fue así. Uno queda muy asustado porque a como quedó el carro es un milagro que todos salieran con vida”, añadió.
Ramírez contó que el accidente ocurrió cuando la familia regresaba desde Heredia, donde había visitado a una tía de Osvaldo e iban hacia su hogar, en Río Hondo de Siquirres.
De acuerdo con la Policía de Tránsito, el accidente se dio por un falso adelantamiento hecho por el chofer del carro.