Sucesos

Caso Tamara Centeno: Terrible hallazgo confirmaría lo peor

Agentes trabajan en Palmares en el hallazgo de un cuerpo dentro de una bolsa

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Los agentes del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) trabajan en el hallazgo de un cuerpo en Palmares que se sospecha sería de la joven desaparecida Tamara Centeno, quien estaba embarazada.

Tamara Centeno
Tamara Centeno temía decirle a su esposo que estaba embarazada. (Facebook/Tomada de redes sociales)

El director del OIJ, Randall Zúñiga posteó en redes sociales: “OIJ encuentra cuerpo dentro de una bolsa que se presume es de Tamara Centeno cerca de calle La Granja en Palmares. El sospechoso está detenido desde hace unas horas y es el cónyuge de 60 años de edad. Un nuevo posible femicidio, que se resuelve aún antes de encontrar el cuerpo”.

Tamara estaba desaparecida desde el pasado martes 21 de enero, su mamá Andrea Murillo contó a La Teja que ella sospechaba que su yerno de 60 años es el sospechoso.

Según se supo, Tamara tenía cuatro meses de embarazo y, al parecer, le preocupaba darle la noticia a su esposo.

La madre contó que el pasado miércoles le envió un mensaje a su hija, pero esta no respondió, por lo que el jueves intentó comunicarse con ella de nuevo, pero tampoco obtuvo respuesta.

Murillo explicó que por medio de una aplicación ella tiene acceso a la ubicación del celular de Tamara y ese mismo día vio que este mostraba ubicaciones muy extrañas en distintos puntos de Puntarenas, Palmares y San Ramón, como si alguien hubiese estado manejando un carro de forma confusa.

“En la última ubicación vi que estaba en una clínica en San Ramón, entonces fui a preguntar si tenían una paciente con el nombre de ella y me dijeron que no. Luego encontramos el celular de ella en un basurero cerca de la clínica, estaba en una bolsa plástica y con unas servilletas”, detalló.

Al no saber nada de su hija, Andrea decidió ir a la casa en la que vivía Tamara y su esposo, de apellido Moriondo, ubicada en El Empalme, en Santiago de San Ramón.

“Ahí me encontré el carro en el garaje, estaba encendido y todo forrado, además tenía una manguera desde la mufla hasta la parte de la cajuela. Me pareció muy extraño y me asomé por la ventana, pero no vi nada, entonces abrí la puerta y me encontré con el señor (Moriondo) que estaba hincado en el asiento de atrás, con la cara hacia el maletero, estaba tratando de matarse inhalando el humo del carro y también tenía un poco cortadas las venas (de las muñecas).

De confirmarse la triste noticia este sería el segundo femicidio del año.

Silvia Coto

Silvia Coto

Periodista de sucesos y judiciales. Bachiller en Ciencias de la Comunicación Colectiva con énfasis en Periodismo. Labora en Grupo Nación desde el 2010.

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