Nadia Peraza Espinoza, de 21 años, estaba aún con vida el pasado jueves 21 de febrero, pero después de esa fecha su paradero ha sido incierto.
La denuncia de su desaparición la dieron hasta el 1 de marzo anterior, luego de que a la familia de Peraza le extrañara que no llegara a recoger a su hija de dos años, a quien adoraba.
Randall Zúñiga, director del OIJ, afirma que tuvieron que realizar una reconstrucción de hechos de al menos unos diez días, contando desde el día que desapareció hasta la denuncia interpuesta.
“Al ser una investigación que involucra una reconstrucción de hechos de más de diez días, genera una dificultad aún mayor para descartar a otras personas, hasta que OIJ determina que hay una línea investigativa y que efectivamente el sospechoso es el esposo de Nadia (un costarricense de apellido Buzano Paisano)”, señaló Zúñiga.
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Agregó que Buzano ejercía violencia sobre Nadia y ante esta situación es que la hija de ellos estaba a cargo de la familia de Nadia.
“Ellos tienen una hija en común que desde el 4 de febrero estaba a cargo de los papás de Nadia por la misma situación de violencia de género, debido al poder que ejercía el esposo respecto a Nadia”, sostuvo.
Trascendió que Nadia trabajaba en un restaurante de comidas mexicanas, al parecer Buzano no tenía trabajo ni oficio.
“Lo último que tenemos de ella a nivel investigativo es del día 21 de febrero, nosotros podemos afirmar que ella estaba en un sitio cercano al trabajo, después de eso no tenemos más reportes de acuerdo a la línea investigativa que tenemos”, manifestó.
Este jueves en calle Corobicí en San Pablo de Heredia fue hallada una refrigeradora en el pasillo de una casa que tiene restos humanos, que podrían ser de Nadia.