El caso por la desaparición de la joven Karla Solano Bonilla, de 18 años, sigue teniendo más preguntas que respuestas, ya que aunque el OIJ detuvo al principal sospechoso de su desaparición, el paradero de la muchacha sigue siendo un misterio.
En nuevo esfuerzo por descubrir qué fue lo que realmente sucedió con Karla, la mañana de este viernes agentes judiciales inspeccionaron un lugar en Limón, debido a que, en apariencia, recibieron información de que ahí podrían haber evidencias de importancia.
Así lo confirmó a La Teja una fuente cercana al caso, la cual indicó que los investigadores realizaron una búsqueda dentro de una propiedad ubicada en la localidad de Bananito Sur, en Matama de Limón.
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La fuente informó a este medio que dicha búsqueda tuvo un resultado negativo, lo que no se dio a conocer es si los judiciales llegaron hasta esa finca para buscar un cuerpo u otra clase de indicio.
El avance más importante en esta investigación ocurrió la noche del pasado miércoles, cuando la Policía Judicial realizó cuatro allanamientos en Limón para detener a un hombre apellidado Alvarado, de 56 años, quien figura como sospechoso de la desaparición de la joven.
De acuerdo con las autoridades, Alvarado fue la última persona con la que Karla fue vista, pues cámaras de seguridad revelan que el pasado 23 de noviembre la muchacha se subió al carro manejado por el sospechoso y después de eso no se volvió a saber nada de ella.
En cuanto a Alvarado, las autoridades no han brindado mayores detalles sobre él, lo único que trascendió es que era vecino de la familia de Karla y los conocía desde hace mucho tiempo.