El tesorero apellidado Olivas, quien fue detenido este miércoles como sospechoso de sacar en sobre de manila los ¢3200 millones del faltante reportado por el Banco Nacional, habría gastado una gran parte de ese dinero en uno de sus pasatiempos favoritos.
Así lo reveló Randall Zúñiga, director del Organismo de Investigación Judicial (OIJ), en una conferencia realizada la mañana de este miércoles, en la cual explicó que este caso fue nombrado “Gallo tapado” por la afición que el sospechoso tenía por los juegos de azar, especialmente por la lotería.
“Dentro de la investigación tenemos que esta persona, que tenía acceso al dinero, compraba mucha lotería, era muy asiduo a comprar lotería en cantidades muy grandes, estamos hablando de que iniciaba con ¢100 mil por día, luego pasó a ¢1 millón y luego hasta los ¢3 millones según la investigación”, detalló Zúñiga.
LEA MÁS: Caso “Gallo Tapado”: Así fue cómo tesorero habría sacado ¢3200 millones del Banco Nacional
Aunque aún no han logrado determinar qué pasó con el dinero sustraído de las bóvedas del banco, el director del OIJ presume que una importante parte de este fue gastado por Olivas en lotería.
“Buena parte del dinero se pudo haber ido en ese gasto en juegos de azar, en todos los juegos de azar que ustedes se puedan imaginar relacionados con la lotería, tiempos, chances, lotería nacional y tres monazos”, agregó.
Detenidos
Olivas figura como una de las 8 personas que fueron detenidas por el OIJ tras la realización de 11 allanamientos en sectores como Moravia, Guadalupe, Escazú, Desamparados y la sede central del Banco Nacional. Entre los detenidos hay un supervisor, dos contadores, el tesorero general, dos custodios y un oficial de seguridad privada.
También se allanó la casa de la director jurídica del BN, apellidada Herrera, pero esta no fue detenida. Dicha diligencia esta dirigida en determinar porque la denuncia por la sustracción del dinero se presentó 20 días después de que se descubrieron los hechos.
Carlo Díaz, Fiscal General, explicó que, al parecer, Olivas aprovechó un punto ciego de una cámara de seguridad para sustraer el dinero de una caja fuerte, el cual introducía en sobre de manila. El sospechoso pasaba por todos los controles de seguridad con toda tranquilidad pues nunca fue revisado.
“La investigación nos arroja a una persona como un principal autor material de los hechos y nos lleva a posibles cómplices o autores del delito de facilitación culposa, que no cumplieron con su funciona de supervisar, eso nos hace pensar que, eventualmente, puede haber una organización, pero debemos determinar eso con la prueba”, señaló el fiscal.
Díaz mencionó que cuentan con información para ligar a Olivas con al menos 10 hechos que quedaron grabados, sin embargo, destacó que esta situación se vendría dando desde el 2019, año en que se realizó el último arqueo físico al Centro Institucional de Procesamiento de Efectivo, del cual, al parecer, Olivas era el encargado.