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Seis funcionarios del Patronato Nacional de la Infancia (PANI) fueron suspendidos este martes de su cargo por una supuesta negligencia en el caso de Keibril Amira García Amador, la bebé desaparecida en Cervantes de Cartago.
La oficina de prensa de la institución informó que a los seis se les abrió una investigación disciplinaria y se recomendó, como medida cautelar, la suspensión con goce de salario.
Se consultó cuáles eran los cargos que ocupaban los funcionarios y la relación que tenían con la causa; sin embargo, se está a la espera de la respuesta.
Al parecer, el PANI tenía conocimiento de la situación de la mamá de la bebé, una joven de 13 años, y que desde el año pasado se había informado no solo a esa institución sino al Ministerio Público.
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Keibril fue arrebatada de los brazos de su mamá, la mañana del domingo 9 de abril anterior, y desde entonces su paradero es un misterio.
El sospechoso es un costarricense de apellidos Casasola Salas, de 33 años, quien violó, en al menos tres ocasiones, a la entonces niña de 11 años y la dejó embarazada de Keibril.
El sujeto permanece en prisión preventiva como sospechoso de los hechos.
