Doña María de Los Ángeles Hernández Mora es una de las afectadas por la cabeza de agua que inundó varias casas en La Fusilera en San Juan de Dios de Desamparados, ella perdió su salón de belleza.
Ella nos contó que el viernes de la semana pasada fue uno de los días más difíciles de su vida, ella estaba atendiendo a su clientela en su salón llamado Kristel, que con mucho esfuerzo levantó en una espacio que sus papás le dieron en la casa.
“Yo estaba trabajando, no estaba lloviendo tan fuerte cuando empecé a escuchar gritos. ¡Pero es que no le puedo explicar eran de esos gritos que a usted se le quedan pegados en la mente y no se pueden olvidar! Pero es que además la gente gritaba al mismo tiempo, en eso, empezó a subir el nivel del agua, pero fue tan rápido como cuando usted llena un balde”, contó Hernández.
Doña María asegura que había una señora y un bebé en el salón, a todos los ayudaron a salir los vecinos.
“Esa agua entraba por todo lado y con una fuerza como si fuera el mar, y ya yo después también pegaba gritos para que me ayudaran, todo flotaba, era algo que uno no podía creer”, dijo la afectada.
Está emprededora asegura que perdió casi ¢5 millones en su salón porque el agua le dañó todo. Ella tenía la fe de que unas cosas que quedaron sobre los muebles se salvaran, pero el agua subió más de 1,80 y todo se volcó por lo que las secadoras, planchas y otras cosas se dañaron. Hasta unos espejos se quebraron porque el agua los hizo arrancados.
“La gente que tiene un negocito sabe lo que cuesta y lo que duele pasar por algo así, porque ahorita quiero trabajar, pero estoy como dicen atada de manos porque no tengo nada, me quedaron algunos productos y me los robaron, en algunas casas pasó que gente se metió a sacar cosas”, dijo.
El agua levantó el piso del salón, ella limpió el lugar y lo único que le quedó fue un espejo pegado a una pared, pues los muebles se pudrieron.
“Esto duele mucho, hay mucha gente afectada en esta comunidad, casi 200 personas, solo ha venido el Ministerio de Salud, pero no sabe uno si le van a ayudar o no, aquí la gente está muy desesperada”, dijo doña María.
LEA MÁS: Afectada por cabeza de agua en Desamparados: “Si nos quedamos no podríamos volver a dormir”
Ahora ella confiesa que a diario se pregunta, ¿cómo voy a volver a empezar?, mientras que además faltan las lluvias del mes más bravo, octubre.
Si usted quiere ayudar a doña María de Los Ángeles la puede contactarla al teléfono: 8837-6947.
En la Fusilera la emergencia no acaba, tras siete días desde que la cabeza de agua los afectó, dañó las casas y las calles siguen repletas de lodo.