Un bebé de un año y tres meses murió asfixiado con un maní, la trágica situación ocurrió dentro de la casa del pequeño, en San Rafael de Poás, en Alajuela.
De acuerdo con las autoridades, el inocente estaba comiendo maní junto con su hermanito, de 3 años, cuando ocurrió la tragedia.
En el Organismo de Investigación Judicial (OIJ) señalaron que a las 6:36 p. m. de este miércoles los alertaron del levantamiento del cuerpo del pequeño en el hospital San Rafael de Alajuela; les indicaron que había ingresado al centro médico por obstrucción de vías respiratorias y falleció.
Los médicos señalan que los niños menores de 5 años son los que más atención hay que prestarles al momento de comer y en general; primero porque las vías aéreas son más pequeñas y pueden obstruir la respiración.
Recomiendan partir los alimentos para evitar tragedias.