Lo que prácticamente se trataba de un secreto a voces se terminó de confirmar este martes, pues el Banco Nacional confirmó un faltante de ¢3.293 millones, como parte de las inconsistencias detectadas entre sus registros y el dinero que tienen en custodia.
Esta situación se venía hablando desde hace algunos días, pero fue hasta este martes que dicha entidad realizó una conferencia de prensa en la cual Jaime Murillo, gerente general interino, confirmó el faltante millonario, el cual fue descubierto en agosto de este año.
Por este hecho, el Banco Nacional abrió una investigación a lo interno y, como parte de las pesquisas, suspendieron a cinco funcionarios: dos supervisores del área de Administración de Numerario, un técnico, un custodio y un contador.
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Además, Víquez informó que este mismo lunes se apersonaron ante el Ministerio Público para presentar la respectiva denuncia contra estas personas, cuyas identidades no se dieron a conocer.
“Por el momento, el Banco Nacional no puede ofrecer mayores detalles sobre el caso hasta que concluya la investigación interna. Una vez finalizada, se comunicarán oportunamente los hallazgos y se tomarán las medidas que correspondan”, informó el banco en un comunicado de prensa.
Pese a la preocupación que ha generado este hecho, el banco sostiene que este caso no afecta las cuentas bancarias de sus clientes, sus productos y servicios, ni su solvencia.