A las cuadrillas que trabajan en la ruta 32 (carretera Limón - San José) les ha tocado rudísimo este miércoles, ya que mientras realizan labores de limpieza sigue cayendo material.
Ya se cumplen cinco días desde que esa importante carretera está cerrada debido a un deslizamiento de grandes proporciones a mitad del cerro.
Las autoridades mantienen dos frentes de trabajo uno que viene de Guápiles y otro de San José para fajarse bonito en el kilómetro 28.
Don Juan Carlos Calderón, del MOPT, aseguró que la limpieza avanza lentamente debido a que las condiciones climáticas ponen en riesgo a los trabajadores.
Calderón asegura que en otro punto cayó material.
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En los recorridos que las autoridades de Tránsito realizan durante las mañanas se han percatado de todo el material que ha caído, como barro, piedras y ramas.
El MOPT podría habilitar el paso este viernes, pero todo depende del tiempo y también de que las cuadrillas puedan seguir avanzando.
Sobre el kilómetro 28 cayeron el equivalente a 400 vagonetas de tierra.
“Para uno como trailero son muy duros estos cierres de carretera, porque muchas veces hay que pasar demasiadas horas esperando y los productos corren el riesgo de perderse. También baja el trabajito y al final todo afecta. Esta ruta desde que soy conductor (25 años) es un problema y deberían darle una solución pronta, pero siempre es lo mismo uno espera y los trabajos que hacen son malos. A mí muchas veces me ha pasado que voy manejando y oigo donde me caen las piedras, solo queda encomendarse a Dios, pero sigo y no me detengo, los carros algunas veces se van detrás de uno por el temor de viajar por ahí”, dijo Vinicio Rojas, trailero.
Otras rutas por las que pueden viajar los conductores son Chilamate, Turrialba y Sarapiquí.
“Siempre da miedo viajar por la ruta 32, pero es que no es solo en el invierno, sino todo el tiempo, porque cae material y también la neblina que no se ve nada. Este cierre tan largo es una pesadilla. Yo viajo por trabajo todas las semanas y me da un poco de miedo ir por Turrialba, pero me ha tocado, la verdad uno desea que la apertura se haga pronto, pero si da miedo pasar en carro ahora con esos trabajadores que están sacando el material, solo queda tener paciencia y en mi caso siempre viajo de día para evitar inconvenientes”, dijo Alejandra López, otra conductora afectadas.