Óscar Pérez Urbina, de 19 años, un reo que gozaba de casa por cárcel con monitoreo electrónico (tobillera) y quien es uno de los tres sospechosos de matar a la viejita Luz Marina Campos Jiménez, de 74 años, irá seis meses a prisión preventiva mientras lo siguen investigando por este homicidio.
El Juzgado Penal de San Ramón le dictó esta medida a Pérez, al igual que a otro sujeto de apellido Sandoval González y un nieto de la abuelita, de apellido Alán (23 años).
Pérez anduvo por la libre haciendo fechorías, a pesar que desde enero del año pasado estaba en su casa con la tobillera, terminando de cumplir una sentencia por el delito de tentativa de robo simple usando fuerza. Esa pena de 4 años se la recetó el Tribunal de Flagrancia de Alajuela.
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Desde agosto del 2017, este sujeto ya sumaba incumplimientos de su beneficio carcelario, pues la tobillera que andaba la había cortado, no cargaba el dispositivo e incluso violaba el área en la que debía mantenerse. Ninguna autoridad hizo nada para detenerlo, pues el Ministerio de Justicia señala que pasaban informes al Juzgado de Ejecución de la Pena y no hubo cambio de medida.
En noviembre del año pasado la situación de Pérez estuvo en dicho juzgado y una jueza de apellido Robles, con 25 años de experiencia, no le hizo ningún cambio de medida.
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