El caso por la supuesta quiebra fraudulenta de la Corporación Yanber S.A. tiene un nuevo capítulo.
La Fiscalía ordenó allanar ayer la casa de Gerardo Corrales Brenes, exgerente general del Bac San José.
La casa de Corrales, en Curridabat, no fue el único punto intervenido por las autoridades, que también allanaron las oficinas del Bac San José en Plaza Roble (Escazú), el bufete Gómez & Galindo y la oficina Consultores Financieros Cofín S.A, estos dos últimos en Avenida Escazú.
Las autoridades también allanaron otra casa de Curridabat que pertence al consultor financiero Luis Alberto Vargas Solís.
“Los allanamientos no buscan realizar detenciones de personas. Las actuaciones que se realicen son de carácter privado, esta es toda la información que se puede brindar por el momento”, indicó la Fiscalía en un correo.
Según el Ministerio Público, el fin de estos operativo fue decomisar evidencias documentales, las cuales serían aportadas a la investigación de las operaciones administrativas y financieras realizadas durante la declaratoria de quiebra de Yanber y Fomento Agrícola del Atlántico S.A. (Fadasa).
Nada que ocultar
Dado que se encuentra fuera del país desde el 7 de diciembre, Corrales usó su perfil de Facebook para referirse al caso.
Dijo que las actuaciones del Bac cuando él era el gerente general, siempre fueron apegadas al derecho, la ética y a los principios bancarios.
“Por haberme desempeñado como gerente, de lo cual me honro, se me ha incluido en los allanamientos. Estoy seguro que el banco demostrará que sus actuaciones han sido al nivel de las mejores prácticas bancarias y apegadas a la etica y profesionalismo que siempre lo ha caracterizado”.
“No tengo nada que ocultar y en su momento con mis abogados presentaré mis argumentos en los tribunales (...) Tengo mi consciencia totalmente tranquila y confío en Dios y la Justicia de este país para aclarar todo este asunto”.
En politíca
Corrales se volvió muy conocido por ser la principal cara del Bac, ya que durante 16 años fue el gerente general. A finales de enero del 2016 dejó la gerencia y dijo que lo hacía por temas personales y familiares.
A mediados de marzo de ese mismo año fue dirigente en el Partido Liberación Nacional de cara a las elecciones presidenciales del 2018.
Pero esa no fue la única participación de Corrales en la política, ya que durante la segunda ronda del proceso electoral se convritió en uno de los asesores del candidato por el Partido Restauración Nacionall, Fabricio Alvarado.
Posible ventaja
Según información de La Nación, el vínculo del Bac con este caso tendría que ver con una presunta ventaja indebida que obtuvo el banco para recuperar la plata de un crédito dado a Yanber por encima de los otros acreedores (a quienes debían plata).
El hecho se inició en mayo del 2015, cuando Yanber y Fadasa alegaron problemas financieros y solicitaron al Juzgado Concursal de San José que abriera un convenio preventivo, para lo cual se les dio un plazo de 15 días para ponerse al día con los acreedores.
Aparentemente, para saldar el crédito de $613 mil que tenía con el Bac, Yanber y Fadasa firmaron un contrato con el banco en el cual acordaron entregarle las facturas por cobrar que tenían y con lo cual se saldó la deuda.
Según Daniel Suchar, especialista financiero, esto significaría que para recuperar esa plata, el Bac iba a tener que cobrar a quienes le debían plata a Yanber.
Para no complicarse la vida el Bac le habría pasado esas facturas a la sociedad CJE Consultoría y Fiduciaria S.A, cuyo presidente es Vargas Solís, para que esta hiciera los cobros y se ganara una comisión.
Donde la cosa se complica es cuando se descubre, por medio de una auditoria, que Yanber tenía 14 cuentas bancarias, pero desde inicios del 2015 y hasta febrero del 2016 manejó sus entradas y salidas de plata por medio de una sola cuenta del BCR, a nombre del Fideicomiso CJE Consultoría Fiduciaria S. A.
Esta situación hace pensar que hubo un posible acuerdo que benefició al Bac por encima de los otros bancos, sin embargo, ese hecho no ha sido confirmado por la Fiscalía.
En setiembre del 2018 fue cuando se resolvió la declaratoria de quiebra de las compañías Yanber y Fadasa.
Situación maquillada
El caso Yanber se destapó en el 2016, cuando el Banco Nacional interpuso una denuncia por un supuesto fraude de $6 millones y ¢2.172 millones.
A esta denuncia se sumaron el Banco de Costa Rica por un crédito de ¢6.975 millones; el Banco Crédito Agrícola por un crédito de ¢1.120 millones y la Corporación Financiera Cofín, cuyo monto supuestamente defraudado no se ha determinado.
Según la Fiscalía, el comité ejecutivo de Yanber habría maquillado informes financieros para engañar bancos y obtener así los créditos millonarios. Siete meses después de la auditoría la empresa solicitó el convenio preventivo por problemas financieros.
Además de Samuel Yankelewitz, exdueño de Yanber, y de su hijo Andrés Yankelewitz Lev, exvicepresidente, también son investigados el exgerente general de apellidos Soto Bolaños, los exgerentes financieros apellidados Paniagua y Sandí Sandí, así como del exdirector financiero, Brenes Chaves.