Un agricultor de apellidos Vargas Barboza fue detenido la mañana de este sábado como sospechoso de matar y prenderle fuego a Ericka Segura Sequeira, quien trabajaba en un bar en Ticabán.
La captura se dio en la casa del sospechoso, de 31 años, ubicada en San Gerardo de Ticabán, en la Rita de Pococí en Limón.
El cuerpo de la mujer, de 33 años, fue encontrado la madrugada del jueves pasado, a las 3:56 a. m, en Vueltas del Río, en San Gerardo de Pococí. Ese día, unos oficiales que pasaban por el lugar se percataron de que había una moto en llamas y debajo estaba la mujer.
Aunque en primera instancia se creyó que se podía tratar de un accidente de tránsito, los expertos forenses detectaron que estaban ante un homicidio ya que en el sitio habían huellas de arrastre.
Según informó el OIJ, durante la investigación se logró determinar que Segura salió del bar donde trabajaba con el sospechosos y ambos iban en la moto de ella. Él fue la última persona con que la madre de tres hijas fue vista.
El sospechoso vive a 300 metros de donde se localizó el cuerpo y según trascendió durante el allanamiento, las autoridades lograron dar con evidencia que lo vincula con el caso.
Vargas no tenía antecedentes.
Ericka trabajaba en el bar La Aguja ubicado en San Gerardo, a un kilómetros de donde encontraron su cuerpo, ella era vecina de la Rita de Pococí y era madre soltera de tres hijas de 13, 11 y 7 años.
El día del asesinato los familiares de Ericka dijeron a las autoridades que durante la madrugada del jueves la llamaron por teléfono y ella les dijo que tenía problemas con la cadena de la motocicleta, que era estilo montañera. Luego no volvió a responder los teléfonos.
La moto era propiedad del compañero sentimental de Segura. Se cree que un ataque sexual pudo ser la causa del asesinato.