Las cerraduras del hotel La Mansión Inn en Manuel Antonio Quepos nunca recibieron mantenimiento después de haber sido instaladas.
Así lo afirmó Heiner Solano Benavides, dueño de una empresa de cerraduras que dio este servicio al hotel en el que mataron a la doctora María Luisa Cedeño Quesada.
Señaló que no recuerda la fecha en la que instaló el servicio, pero sí sabe que fue entre el 2000 y el 2003.
“El único mantenimiento del hotel solo se realizó el año pasado (2021), después de la diligencia judicial”, dijo el testigo, señalando que incluso ya el hotel tenía otro nombre.
Manifestó que la empresa que hace estas cerraduras crea dos tarjetas: 1 la que le dan al huésped y la segunda es una tarjeta maestra que puede abrir estas habitaciones siempre y cuando se programe por medio de un software que instalan en una computadora.
Las 400 veces que se abra o cierre la puerta con estas cerraduras quedaran registradas en la propia cerradura, más no en el software; solo se podrá extraer por medio de un aparato que tienen y se llama Programador Portátil conocido como ‘PP’.
“Cuando la cerradura recibe una tarjeta aprobada, dispara y al bajar la manilla la puerta se abre”, señaló el testigo.
Las tarjetas para los huéspedes son registradas con el nombre de quién la tendrá y en el software (que tiene el hotel) queda el nombre del usuario que registró la tarjeta para el huésped.
María Luisa Cedeño estaba hospedada en este hotel disfrutando de unos días de descanso y la mataron dentro de la habitación 3 que le asignaron, su cuerpo fue hallado el 20 de julio del 2020.