Escuchar
25 familias menos lloraron por el homicidio de un ser querido en el primer trimestre del año, en comparación con el 2018.
El ministerio de Seguridad Pública informó que entre enero y marzo se reportaron 130 muertes violentas, mientras que en el mismo periodo del año pasado se dieron 155.
LEA MÁS: El 2017 se convirtió en el año más violento en la historia del país
Michael Soto, jerarca de Seguridad, celebró la baja y dijo que los datos demuestran que van por buen camino.
“Estamos muy complacidos, aunque el mes de marzo fue un mes difícil, se dieron bastantes homicidios, comparando este mes con el anterior tenemos una disminución. Vamos a seguir trabajando”, expresó.
Soto destaca que la baja responde en gran medida a la implementación de los megaoperativos; solo este 2019 se han llevado a cabo 30 de estas acciones.
En ellos los uniformados de todos los cuerpos policiales del país han arrestado a 1.320 personas, entre ellas 258 con orden de captura; 226 en flagrancia y 124 por delitos contra la propiedad entre otros.
Además, los oficiales han incautado 147 armas de fuego entre pistolas, revólveres, escopetas y otras, así como 131 armas punzo cortantes (cuchillos, punzones y otros).
También sobresale el decomiso de 6.660 botellas de guaro, 10.474 latas de cerveza y 5.061 productos entre ropa, perfumes y otros artículos que fueron metidos al país sin los respectivos permisos y sin pagar impuestos.
Dura lucha
El 2017 cerró con la terrible cifra de 603 homicidios, la más alta en la historia del país, situación que encendió las alertas de las autoridades de seguridad y judiciales.
Pese a que el mismo Michael Soto dijo a inicios del 2018 que el panorama era sombrío y que lo más probable era que ese año incrementara las muertes violentas, no fue así. Para ese momento él trabaja en la Policía Judicial, pero en mayo fue nombrado ministro de Seguridad e inició de inmediato con su programa estrella: los megaoperativos.
LEA MÁS: Vivimos en la región más violenta del planeta
Contra todos los pronósticos al año pasado cerró con 586 homicidios, 17 menos que el 2017; desde hacía cinco años no se daba una baja en la cifra de muertes violentas. Del total de homicidios más del 50% se debe a asuntos relacionados con drogas.
Wálter Espinoza, director del OIJ, ha dicho que los resultados positivos se deben en gran medida a la buena comunicación y coordinación entre los cuerpos policiales y también a que ahora hay mayor presencia policial en las calles.
Además, asegura que han trabajado duro en identificar bandas narcos y sacarlas de circulación lo que ha disminuido los enfrentamientos armados por pleitos territoriales y por venganzas entre los miembros de estas agrupaciones.
