La Corporación Yanber inició este viernes el cierre de su operación industrial en Costa Rica.
Eso significa que 91 trabajadores de la planta de producción se quedarán sin trabajo. Continuarán laborando unas 50 personas, administrativos en su mayoría. Fuera del país, la planilla asciende a 26 trabajadores.
En febrero del 2016, en la empresa laboraban 454 trabajadores.
El cierre se da por falta de capital de trabajo para mantener la fabricación de productos de plástico.
Francis Durman, presidente de la compañía, confirmó a La Nación el cese de operaciones y agregó que a cada empleado se le pagará la totalidad de las prestaciones laborales.
“Hemos tomado una decisión muy importante que es cesar la operación productiva de la Corporación Yanber en Costa Rica. Esto causa que hoy paremos todas las máquinas. Esto nos lleva a tener que rescindir de todos los empleados de la planta productiva”, detalló el empresario.
Además, explicó que las razones del cierre se fundamentan en que no cuentan con recursos para la compra de materia prima y reconoció que subestimaron los cálculos del costo de salvar a la empresa, en vista de la magnitud de la supuesta estafa en la que incurrió la administración anterior, cuando Samuel Yankelewitz era propietario.
También mencionó la crisis mediática, luego de conocerse con más detalle las irregularidades de la anterior administración de Yanber, pues esto habría generado la pérdida de confianza entre los clientes de la compañía.
Muchas deudas
Los problemas de la empresa se hicieron públicos desde mayo del 2015, cuando la corporación acudió a los tribunales para solicitar un proceso de convenio preventivo para evitar la quiebra.
En ese momento, Yanber acumulaba deudas por $62 millones con proveedores y entidades financieras, locales y extranjeras.
Yankelewitz entregó las acciones de la empresa en pago de la deuda con 18 bancos privados, en febrero del 2016. Las entidades bancarias pasaron, en ese momento, de acreedores a dueños de la firma.
Además, se readecuó las condiciones crediticias con los bancos estatales: Banco Nacional, Bancrédito y el Banco de Costa Rica (BCR).
En octubre del 2016, las entidades financieras solicitan a Durman y a su socio Allan Rodríguez que compraran la corporación en $10 millones, algo que se concretó en octubre de 2016. Él aseguró que aceptó involucrarse con Yanber porque su interés era ayudar a los trabajadores.
Sin embargo, las deudas de la compañía ascendían a $30 millones.
Por este caso, Yankelewitz (de 80 años) hoy cumple una medida de arresto domiciliario dictada en marzo pasado. El Ministerio Público lo investiga por cuatro supuestos delitos de estafa contra entidades financieras.
Además, en febrero pasado, el Juzgado Penal de San José impuso seis meses de prisión preventiva contra el exgerente general de Yanber de apellidos Soto Bolaños, de 48 años; los exgerentes financieros apellidados Paniagua Moya, de 29, y Sandí Sandí, de 71, así como al exdirector financiero, Brenes Chaves, de 54.
A todos se les investiga por supuestamente maquillar los estados financieros de Yanber con el objetivo de obtener financiamiento en la banca y materia prima de proveedores.