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Óscar Rugama Jirón, de 9 añitos, cumplió este domingo su sueño de conocer la playa de Cahuita.
El viaje del niño a este hermoso pueblo del Caribe sur lo organizó la Fundación Pro Ayuda de Cuidado Paliativo, del Hospital Nacional de Niños.
La fundación se dio cuenta del sueño de Óscar, vecino de Río Frío de Sarapiquí, y decidió poner manos a la obra. Para ello contactaron al empresario Rubén Fallas y a la regidora municipal de Talamanca Hellen Simmons, quienes se pusieron la camiseta y consiguieron que empresarios turísticos y hoteleros se apuntaran para decirle a Óscar que están con él.
El estado de salud de Óscar es delicado, por eso este sábado, a las 6 de la mañana, salieron de su casa en una buseta con todas las condiciones para que pudiera viajar cómodamente.
La aventura fue familiar y con Óscar viajaron su madre, Reina Jirón; su padre, German Rugama y sus hermanas, Angie (12 años) y María Fernanda (7 años). También iba la abuelita paterna, Brenda Martínez.
Al llegar a Cahuita debieron quedarse en el hotel descansando y la doctora Kathia Arias, del Hospital de Niños, quien los acompañaba desde Sarapiquí, le tuvo que aplicar morfina al niño para calmarle el dolor.
La mamá de Óscar cuenta por qué su hijo quería ir al Caribe sur.
“Ninguno en la familia conocía el mar y por eso él se emocionó cuando escuchó de una excursión a la playa que estaba organizando la iglesia a la que asistimos (Centro Evangelístico Finca 4) aunque no sé de dónde supo de Cahuita específicamente”.
Doña Reina agregó que pese a la condición de salud, para ellos la fe es muy grande en que su pronóstico de vida será mayor al que mencionan los médicos.
Como el trajín del viaje fue fuerte para las fuerzas de Óscar, sus padres se encargaron de cargarlo la mayor parte del recorrido.
Muy feliz
Este fin de semana no importaron los dolores de la enfermedad. La emoción y la felicidad invadieron el corazoncito de Óscar para disfrutar una experiencia que jamás olvidará.
“Está muy feliz, pero a la vez muy irritable. El sábado visitamos a los perezosos en Aviarios del Caribe y nos bañamos en el mar como a la una de la tarde, luego nos fuimos al hotel y disfrutamos un rato de la piscina, pero sus fuerzas no le permitieron hacer más”, contó también doña Reina.
Como a Óscar le encanta nadar, este domingo estuvo un ratito en la piscina del hotel antes de salir hacia su aventura en las aguas turquesa del Caribe.
Gracias a Fernando y Mairenas Tours lo llevaron mar adentro en un paseo en bote con su familia. Salieron del atracadero del parque nacional hacia punta Cahuita, donde pudo nadar con salvavidas unos 20 minutos y tanto su padre como la doctora nadaron con él.
“Estuvo nadando y viendo el arrecife con la máscara y luego nos regresamos ya para emprender el viaje de regreso a casa”, contó doña Reina.
A temprana edad
Óscar fue diagnosticado con cáncer desde que tenía cuatro añitos. El tipo que lo atacó fue leucemia (cáncer en la sangre), en esa primera oportunidad logró superarlo y estuvo año y nueve meses libre de la enfermedad; sin embargo, le volvió el 18 de diciembre del 2018.
Pese a que se inició con el tratamiento de inmediato, los médicos les dijeron a los papás que la condición de Óscar no tenía vuelta atrás.
Hasta hace unos meses estuvo asistiendo a clases, en tercer grado, e iba muy bien; sin embargo, la enfermedad se extendió hasta su mandíbula izquierda inflamándole el rostro y ante el “bullying” de algunos compañeros, mejor dejó de ir para evitar que lo molestaran.
“La doctora me explicó que esos ganglios que le salieron son como una defensa del cuerpo para evitar que las células cancerígenas le lleguen al cerebro”, agregó doña Reina.
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“En el caso de él ya el cáncer se extendió al sistema nervioso central y a la mandíbula. La fundación trabaja como un gran apoyo a la familia”, explicó la doctora.
En medio de todo da gusto ver que el pequeño Óscar cumplió su sueño de disfrutar la vida en un lugar tan lindo de nuestro país.
La familia es de escasos recursos, por lo que si usted desea tenderle una mano puede contactar a doña Reina al número 8618-1147.
