La vicepresidenta de la República, Mary Munive, reconoció que le dijo a Gloriana López Fuscaldo, expresidenta del PANI, que estaba “desbordada”.
Este viernes la vicepresidenta compareció ante la Comisión de Derechos Humanos del Congreso y dijo a los legisladores que la condición en la que encontró a López el día que se dio un allanamiento en un albergue en Coronado, donde había menores del Patronato Nacional de la Infancia (PANI), era bastante preocupante.
La diputada Monserrat Ruiz, presidenta de la Comisión de Derechos Humanos, preguntó a Munive qué significa para ella que una persona está desbordada y si le hizo esa afirmación a López y ella reconoció que sí.
Para Munive, una persona está desbordada cuando “está sobresaturada con las situaciones y la presión que ella misma emitía y sobre todo, reiteradamente decía que ya no podía más, que estaba llena de trabajo, que no dormía y que se sentía muy cansada.
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“Ella (Gloriana López) me mencionó asuntos personales críticos y mencionó que no podía dormir, que se sentía muy cansada y que estaba tomando medicación para dormir”, respondió Munive a la legisladora.
La diputada Ruiz se mostró molesta por la manera en la que el Gobierno maneja estos temas, ya que asegura que los funcionarios se extralimitan en sus funciones debido a la forma en la que Gloriana López fue abordada y hasta visitada a su casa.
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“Me preocupa la extralimitación de funciones, señora vicepresidenta, que ustedes están tomando, hay un libertinaje total y absoluto en las funciones que tienen hasta los asesores del despacho presidencial.
“Una cosa sería el poder generar confianza como jefe y otra incidir dentro de esos asesores fuera de los marcos legales de sus funciones, aquí hay que dejar eso claro, no se puede formalizar”, dijo Ruiz.