Los vecinos de La Carpio están furiosos con el Instituto Costarricense de Acueductos y Alacantarillados (AyA) por el faltante de agua que los aqueja desde inicios de febrero.
Alicia Avilés de 57 años, presidenta de la asociación de desarrollo de la Pequeña Gran Ciudad de La Carpio aseguró que la están viendo fea para realizar actividades diarias.
“Tenemos que ir menos al servicio para no gastar agua porque nos cuesta conseguirla”, explicó.
Doña Alicia comentó que son pocas las horas en las que tienen el servicio habilitado.
"No hay un horario fijo pero cuando tenemos agua sale muy poca, a veces tenemos que ir a otras casas a ver si nos regalan", añadió.
Debido a esto, cerca de 50 personas decidieron cerrar la calle principal de esta comunidad como forma de protesta contra el AyA pues consideran que los tienen abandonados.