Llevar la vacuna anticovid a lugares alejados es toda una aventura que requiere de un gran esfuerzo físico y también de valentía, porque a veces hay que cruzar peligrosos ríos.
Un grupo de funcionarios de la zona norte tuvo que llevar el valioso medicamento a Paraíso de San Rafael de Guatuso, en la zona norte del país.
Los profesionales fueron a un pueblo que queda del otro lado del río La Muerte y no tuvieron más opción que subirse a una canasta para llegar a su destino y así inmunizar a la población.
El doctor Henry Córdoba Rodríguez, de 33 años, es enfermero con 11 años de servir a la Caja fue uno de los que llevó a cabo la tarea y dice que pese al susto se siente satisfecho con la labor que él y sus compañeros hicieron.
“No ponemos barreras al proceso de vacunación... Todo lo que uno ofrece lo hace por convicción y vacunar a una persona adulta mayor, encamada o en situación de alto riesgo le deja la mejor paga, porque subirse a una canasta para cruzar un río conocido como la mismísima Muerte, es fuerte”, comentó Córdoba.
En la travesía lo acompañaron sus compañeros Jeison Cortés Corella, Frander Barboza Ramírez y Cesar Villegas Moreira, todos asistentes técnicos de atención primaria en salud (ataps) del área de salud Guatuso.
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Otro que se suma al grupo de los 4x4 es Gilberth Gerardo Rojas Picado, de 59 años, quien tiene dos décadas de ser ataps y trabaja en el puesto de salud de Boca Tapada del área de salud Pital.
“Hacemos que las vacunas contra el covid-19 lleguen a las comunidades de la región Huetar norte como sea; en cuadraciclo, canasta, lancha, a pie, en carro o en moto”, asegura Rojas.
Algunos de los ataps y enfermeros son expertos navegadores de los ríos San Carlos y San Juan, este último hay que conocerlo muy bien para llegar hasta Boca Cureña, un lugar alejado y con condiciones adversas.
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Vacunación avanza
Daniel Salas, ministro de Salud, dijo este lunes en la comparecencia que tuvo en la Asamblea Legislativa que pese a que el ritmo de la vacunación inició muy lento, en las últimas semanas el aumento en el volumen de las entregas ha permitido agilizar el proceso.
Incluso Salas anunció que ya se empezaron a inmunizar a los educadores, quienes están en el grupo cuatro de priorización, por lo que se espera que cuando inicien las clases de nuevo ya estén vacunados casi la totalidad de los docentes.
También se están haciendo coordinaciones con empresas privadas e iglesias para hacer campañas de vacunación masivas y así llegar a la inmunidad de rebaño lo antes posible.