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El templo católico de San Rafael de Heredia, una de las joyas arquitectónicas de la provincia de las flores, está pasando por un proceso de remozamiento.
Desde hace unas semanas se está trabajando en la pintura y mantenimiento del techo, y desde el 15 de octubre se realizan festejos patronales, para que con esa platita, puedan dedicarse a trabajos en los vitrales, humedad de las paredes y problemas de grietas.
El sacerdote Víctor Gómez, vicario parroquial del templo se comenzó a construir en 1887, detalló parte de los trabajos a los que se está sometiendo la iglesia.
“Una obra antigua como esta necesita recibir mantenimiento, y con el dinero que recaudamos hace dos años en los festejos patronales se está restaurando el techo y las canoas. Ahora, esperamos recoger bastante plata para entrarles a otros trabajos que se debe hacer a lo interno del templo.
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“Los materiales del templo se trajeron desde Bélgica y, pese a su antigüedad, se conserva en muy buen estado. El tono original del techo era claro, se oscureció durante un tiempo y se le están dando sus colores originales”, añadió.
De acuerdo con el cura, la Municipalidad de San Rafael ayudará a cercar los alrededores del templo por razones de seguridad.
“Lamentablemente, a veces nos encontramos personas que hacen sus necesidades en los alrededores de la iglesia y también, a veces, se vuelve inseguro y, por eso, debemos tomar esa medida”, afirmó el sacerdote.
El templo fue declarado Patrimonio Histórico Arquitectónico en el 2004, por lo que el Ministerio de Cultura, a través de la Dirección de Patrimonio, supervisa los trabajos en la parroquia.
Una joya
El imponente templo católico se construyó durante el episcopado de monseñor don Bernardo Augusto Thiel, segundo obispo de Costa Rica y de origen alemán, lo que se nota en la influencia europea de las principales iglesias construidas durante su episcopado.
En 1884 aun siendo una filial, los vecinos de San Rafael deseaban tener una iglesia más digna para las celebraciones, dado que la que tenían en aquel entonces, ubicada en el pueblo llamado Piedra Grande (actualmente Bajo de los Molinos) era pequeña y había sufrido daños por varios temblores.
En 1885 mediante cabildo abierto se eligió el terreno donde se construiría el templo, expropiando a sus dueños, quienes no muy contentos cobraron una buena cantidad de dinero y no es hasta febrero de 1887 cuando se iniciaron los trabajos de las zanjas y cimientos de la edificación.
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Actividades
Las actividades para recaudar fondos continúan esta semana. El domingo 27 de octubre habrá mascaradas y un tour guiado a la torre del templo.
El jueves 31, se celebrará el Día de la Mascarada Costarricense, y habrá un concurso de bailarines con máscaras.
El viernes 1° de noviembre se llevará a cabo un concurso de karaoke, el sábado una noche bailable y las actividades finalizarán el domingo, con un tour guiado a la torre del templo, misas y una noche bailable.
El detalle de las actividades está en las redes sociales de la parroquia.
