EscucharA la exmodelo Cristina García le tocó pelear en los tribunales para demostrar que un médico le había deformado sus pompis al inyectarle una sustancia que solo se podía usar en la cara.
Este arriesgado tratamiento la mantiene en riesgo de morir porque la sustancia sigue en su cuerpo. Al médico que hizo el procedimiento le dictaron sentencia en marzo del 2017.
Como ella, varias personas han sufrido consecuencias negativas tras una cirugía estética, solo que algunos han corrido peor suerte ya que terminan en la morgue.
Este tipo de muertes fueron estudiadas en una investigación desarrollada por la doctora Marcela Balmaceda. El trabajo se hizo bajo la supervisión del doctor Maikel Vargas, en el programa de posgrado para una especialidad en medicina legal de la Universidad de Costa Rica.
Los resultados se presentaron en la universidad a mediados del 2017 y se hicieron revisando las autopsias hechas entre enero del 2006 y diciembre del 2015 en el departamento de medicina legal del Poder Judicial. Este viernes se hicieron públicos.
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"Se revisaron los casos en los que hubo una denuncia porque la persona murió luego de realizarse un procedimiento estético", explicó Vargas.
En total encontraron 13 casos, aunque advirtió no todos fueron culpa del médico, algunas muertes fueron por complicaciones esperadas en este tipo de procedimientos, en otros casos sí es un mal manejo quirúrgico o por pocos cuidados después de la intervención.
Se determinó que la primera causa de fallecimiento tras una cirugía estética es el embolismo pulmonar que da durante o después de una liposucción, lo que en pocas palabras significa que se tapa la arteria que lleva sangre al pulmón.
"Mientras extraen la grasa del cuerpo, una vena se puede lesionar y contaminar el flujo de la sangre provocando la obstrucción", explicó el médico.
A ese procedimiento le siguen las operaciones para el agrandamiento de glúteos y, en tercera posición, la cirugía de abdomen.
La investigación es la primera en su tipo en el país, da una voz de alerta a quienes están pensando hacerse un arreglito y que creen que por estar jóvenes y saludables no están en riesgo.
Balmaceda explicó, en un comunicado de prensa enviado por la universidad, que algunos pacientes se someten hasta a cuatro procedimientos estéticos en una misma cirugía, algo que aumenta los riesgos.
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Pregunte e infórmese
Es por todo eso que el doctor Vargas aseguró que antes de someterse a un tratamiento para embellecerse hay que revisar que el médico sea un especialista en el área y no solo un médico general que no está preparado.
En muchos casos la gente acude al doc que le cobra más barato y no al que sí tiene los conocimientos.
Según los datos del Colegio de Médicos, hay 58 cirujanos plásticos y reconstructivos que están trabajando con todas las de la ley, el resto son médicos que se la juegan porque no han estudiado los seis años que se necesita para graduarse en esa especialidad.
Otra señal de alerta son las enfermedades crónicas, Vargas explicó que las personas que han sufrido infartos, tienen hipertensión o diabetes, no deberían ni tratar, porque podrían no despertar jamás.
