El mundo entero está vuelto loco en estos días porque desde Inglaterra se dice que salió por fin a la luz la que se considera la mejor foto de la historia de un Objeto Volador no Identificado (Ovni).
Esta foto se hizo en tierras inglesas en 1990 y es parte del llamado “Caso Calvine”, como se le llamó al evento que ahora se ha hecho viral en redes sociales, más de 30 años después.
El 4 de agosto de 1990, dos jóvenes fotografiaron en la zona de Calvine, en Inglaterra, a un objeto volador extraño de 30 metros de largo, por lo que, asustados por lo que habían presenciado, se escondieron y después analizaron las imágenes del avistamiento. Ahora el mundo está viendo una copia de la foto original y muchos dicen que es la mejor de la historia.
Sin embargo, para el experto costarricense en ovnis también llamado ufólogo (viene de Objeto Volador no Identificado en inglés que se escribe UFO), Óscar Sierra, esa foto inglesa no le llega ni a los talones a la foto de un ovni que se hizo en Costa Rica sobre el lago Cote.
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“La mejor foto ovni de la historia de la humanidad que se tiene es la costarricense, lo digo en todo sentido: nitidez, calidad, es una foto científica de un ovni, algo que nadie ha hecho, es una foto muy famosa, no solo porque se ve claramente el ovni saliendo del lago, sino que la foto, al ser científica tiene información clave, a qué hora se tomó, cuándo, dónde, a qué altura, en fin, un montón de datos que la vuelen invaluable.
“La foto tica fue estudiada por un panel de científicos en Estados Unidos en la universidad de Stanford y determinaron que era real porque tenía mucha información. Me extraña que se diga que esa foto inglesa, que hasta borrosa está, le digan que es la mejor del mundo. No. Es mucho mejor la costarricense”, con firmeza lo asegura Sierra.
El 4 de setiembre de 1971, un avión bimotor Aero Commander F680, tenía una cámara automática que tomó una foto de un ovni.
El Instituto Geográfico Nacional de Costa Rica estaba estudiando el impacto potencial en la tierra y el agua en los alrededores de un proyecto hidroeléctrico en las cercanías del Volcán Arenal en la sierra norte.
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A 10.000 pies, el fotógrafo aéreo Sergio Loaiza activó la cámara cartográfica de 100 libras. En intervalos de 20 segundos, tomó imágenes del agua y la selva tropical en blanco y negro de alta resolución.
Ninguno de los que iban en el avión sabía lo que la cámara había tomado aquella mañana. Incluso después de revelar la película y archivar los negativos, no se dieron cuenta de lo que habían fotografiado. Al sacar los negativos para estudiar posibles formas de unir el lago de Cote con la laguna Arenal, notaron el ovni.