Los adultos mayores en Costa Rica son cerca de 500 mil y muchos de ellos lamentablemente se ven expuestos a maltratos verbales, físicos y patrimoniales.
La aprobación de la ley que penaliza el abandono de quienes peinan canas viene a castigar con cárcel a quienes dejen a su suerte a sus padres o abuelos.
La nueva ley establece una pena de 6 a 10 años de cárcel cuando el abandono lleve a la muerte de la persona adulta mayor; entre 3 y 6 años cuando el abandono cause daños graves en su salud, como la hospitalización por una golpiza y entre 6 meses y 3 años cuando se ponga en peligro la salud física o sicológica de la misma.
Según Teresita Aguilar, presidenta del Consejo Nacional de la Persona Adulta Mayor (Conapam) actualmente tienen entre 115 y 120 adultos mayores abandonados, a los que les están buscando un espacio en un asilo, estos sin contar a los que viven en las calles.
Ignorarlos, hablarles mal, decirles que se callen porque no están hablando con ellos o que ni siquiera les permitan administrar su pensión, son formas de maltrato, explicó Aguilar.
Por su parte, la directora del hospital Geriátrico Blanco Cervantes, Milena Bolaños, aclaró que también podrían castigarse las negligencias, que son cuando dejan de hacer lo que les corresponde en el cuido de los adultos mayores, como dejar de darles los medicamentos o incluso la involuntaria, cuando no los tocan porque les da miedo hacerles daño y se ulceran por esa falta de atención.