La gran mayoría hemos escuchado a algún familiar, amigo o vecino, contar que tuvo que dejar a su perrito solo un buen rato y al regresar lo encontró todo resentido por haberlo dejado sin nadie.
Hasta hace muy poco, esa anécdota la creímos a ojos cerrados, dando por un hecho que sí, que era normal que el perrito se enojara porque lo dejaron solo algunas horas y hasta un día y que tenía toda la razón de resentirse y de no moverle la cola a su dueño por un buen rato.
Sin embargo, la Federación Canina de Costa Rica (ACAN) recién dio su criterio sobre el tema y lo dejó en cuento chino.
“Es normal que los humanos ‘humanicemos’ los sentimientos del perro, lo que no es correcto es pensar que ellos se vayan a enojar o resentir por dejarlo solos un tiempo prudente.
“De hecho, es muy sano darle espacio de soledad al perro y que pueda estar tranquilo, un perro equilibrado puede estar solo y no generar conductas ansiosas”, explica la ACAN en su sección “Mitos a desmentir” sobre los peluditos de la casa.