El presidente de la República, Rodrigo Chaves, quedó muy mal parado en una entrevista que le dio al periodista Fernando del Rincón, de la cadena CNN, durante su programa “Conclusiones”.
Chaves conversó con el comunicador el lunes anterior y hablaron de varios temas, como seguridad, transparencia y hasta de su relación con Daniel Ortega.
Sobre el nicaragüense, el mandatario evitó calificarlo como un dictador.
“Yo ubico a Nicaragua como un vecino a través del cual pasa el comercio internacional vía terrestre. Hemos criticado las acciones del gobierno de Nicaragua cuando ha violado los derechos humanos”, aseguró el presidente, para quien, en su criterio, hay que “tratar de ser buenos vecinos”.
LEA MÁS: Politólogo analiza salida de Luis Amador: “El chavismo se quedó sin figura presidenciable”
Pifias
El presidente la pifió cuando habló de los audios filtrados por la exministra de comunicación Patricia Navarro.
En la entrevista, Chaves la calificó como “criminal confesa”, por dar a conocer las conversaciones, que contenían detalles sobre un crédito con el Banco Centroamericano de Integración Económica. Sin embargo, en este momento la Fiscalía no persigue a Navarro por revelar los audios y el mexicano corrigió al presidente cuando trató a Navarro de “criminal confesa”.
Además, pareció no recordar datos históricos del país. Por ejemplo, dijo que en 1989 el presidente de la República era José María Figueres Olsen, cuando lo correcto es que en ese año el país era gobernado por el liberacionista y premio Nobel de la Paz Óscar Arias.
Chaves intentó bajarle el piso al trabajo de los policías, cuando dijo que hay una separación de poderes y que por eso los miembros de la Fuerza Pública no puede detener a delincuentes identificados. Lo cierto es que en el país la Policía sí puede capturar a personas sospechosas de delitos.