EscucharEs muy común que un perro sienta miedo de subirse a un carro y si la primera experiencia no fue muy buena, que digamos, la cosa se pone peor.
El adiestrador canino Max Sandí asegura que todo en la vida requiere un proceso, por lo que acostumbrar a una mascota a andar en carro no es la excepción.
El experto dice que lo primero que hay que tener es paciencia.
“Hay que asociar el vehículo con experiencias positivas, para empezar se puede abrir el carro, subir el perro y darle una galleta o un premio, luego se baja del vehículo y así se dio cuenta que fue bonito subirse al carro; eso se debe repetir unos tres o cuatro días.
“Después se puede hacer lo mismo, pero ya encendiendo el carro para que el perro se acostumbre a escuchar el motor, eso sería por otros tres o cuatro días. Algunas personas podrán cuestionar que el proceso es muy lento, pero para que todo salga bien lo mejor es tomarse su tiempo”, aseguró.
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Ya cuando se ha avanzado y el perro se sube con confianza al carro, se le puede poner la pechera y el cinturón y llevarlo a dar una vuelta corta en el carro. La idea es que cada vez se hagan viajes más largos hasta que ya se lo pueda llevar hasta la playa.
Muy inteligentes
Tome en cuenta que si usted solo sube el perrito al carro para llevarlo al veterinario, cosa que probablemente no le guste mucho, él no se va a sentir cómodo y evitará subirse al automóvil, así que cuando pueda llévelo a pasear a un parque o a dar una vuelta.
También es importante que tome en cuenta que si lleva a su can a un paseo largo lo mejor es que haga paradas cada 45 minutos o una hora para que se estire, camine un poco, tome agua y haga sus necesidades. La parada puede ser de unos cinco minutos.
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Si es un lugar cálido lo mejor es que lleve el aire acondicionado del carro encendido para que el animal no vaya a sufrir un golpe de calor.
Por último, revise constantemente la condición del perro y si ve que va jadeando mucho o está raro, mejor deténgase hasta que se estabilice.
