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En pleno 2024, la era de la tecnología le pasa mucha factura a la salud ocular de los más pequeños de la casa, pero eso se puede evitar con solo seguir una serie de recomendaciones.
Es vital tener descansos visuales regulares, porque las pantallas pueden ser agotadoras para los ojos de los niños. La regla 20-20-20 es útil: cada 20 minutos mire a 20 pies de distancia durante al menos 20 segundos.
Otro dato muy importante y al que no se le suele dar relevancia es la iluminación; en áreas donde los niños están utilizando dispositivos electrónicos tiene que contar con una iluminación adecuada. La luz natural es la mejor, pero si están en interiores, una luz suave y difusa es preferible a la luz directa y brillante.
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También es clave que los padres o adultos responsables de los menores les fomenten actividades al aire libre. El tiempo al aire libre no solo promueve un estilo de vida activo, sino que también es beneficioso para la salud ocular.
Por último, los especialistas recomiendan que los pequeños, aunque tengan buena vista y no tengan síntomas de problemas oculares, se sometan a revisiones regulares.
