La Fundación Partir con Dignidad fue creada en el año 2013 por profesionales del Hospital Nacional de Geriatría y del Servicio de Atención Comunitaria Geriátrica (ACG), especialmente sensibilizados a raíz de las 4.500 visitas domiciliares anuales que realizan a familias y a sus adultos mayores, quienes sufren debido a sus enfermedades terminales.
Estas visitas realizadas a la intimidad del hogar muestran las tareas amorosas y desinteresadas de los parientes; ellos brindan atención a sus seres queridos, sacrificando, entre otras cosas, su estabilidad económica y su salud, tanto física como mental; y crean conciencia respecto de las necesidades desatendidas de la persona enferma y de miembros de sus familias.
“Vemos personas morir en condiciones indignas, pese a los esfuerzos que como sociedad realizamos. Cosas tan básicas como pañales, guantes, incluso una cama en la cual morir con dignidad, son necesidades de todos los días que el equipo detecta”, explica el médico geriatra y paliativista, José Ernesto Picado Ovares, uno de los fundadores.
La Fundación nace justamente ante esta necesidad comprobada de que, a pesar de los esfuerzos, con impotencia no han podido resolver, pero sí aliviar. “Partir con Dignidad” es un concepto que va más allá de ofrecer materiales a familias necesitadas. “Buscamos ayudar a resolver la problemática en salud que implican los cambios demográficos relacionados con el envejecimiento, sobre todo en familias en condición de pobreza y extrema pobreza”.