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Pulseador que tiene tramo fuera del Simón Bolívar: “Pasaré el peor cumpleaños y Día del Padre de mi vida”

El josefino que tiene tramo afuera del antiguo zoológico abre todos los días, pero no logra vender ni un cinco

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Don Javier Alcázar Castro, quien tiene un tramo en las afueras del antiguo zoológico Simón Bolívar, está desesperado porque sus ventas se apagaron del todo desde que el pasado 10 de mayo se cerró el zoológico.

No le llega nadie y por eso en el último mes no ha vendido ni una botella de agua, a pesar de que abre hasta sábados y domingos el tramito llamado Kiosko Alcázar, el cual es de su familia desde hace 55 años.

“Prácticamente nací en este tramo”, dice el vecino de Cinco Esquinas de Tibás, quien el próximo 15 de junio cumple 57 años.

10/05/2024, San José, Parque Simón Bolívar, fotografías del último día en funcionamiento del zoológico, va ser cerrado y los animales trasladados a otros centros para su atención.
Don Javier tiene el tramo afuera del antiguo zoológico Simón Bolívar. (Jose Cordero)

“No tengo duda de que pasaré el peor cumpleaños y Día del Padre de mi vida. Ya va un mes del cierre del zoológico y nada de que me gano un cinco. Ya debo un mes del seguro y se va a juntar otro, eso significa que debo buscar 70 mil colones de algún lado.

“Me estoy sosteniendo como los valientes, sin embargo, es muy duro todo, porque las ventas se fueron abajo por completo. Le pregunto a los guardas que dejaron cuidando el lugar si abrirán algo pronto y nadie sabe nada”, dice con pesar don Javier.

Javier Alcázar Castro trabaja en el Kiosko Alcázar que es de su familia desde hace 55 años y está en las afueras del antiguo zoológico Simón Bolívar.
El Kiosko Alcázar ha estado en la familia de don Javier desde hace 55 años. (Cortesía)

Como tiene toda la vida de estar en ese tramo, a la familia le duele mucho que lo tenga que dejar, por eso hacen hasta lo imposible para no abandonarlo.

Tiene tanta fe que antes de hablar de cierre, prefiere guardar fuerte la esperanza de que el gobierno se decida a abrir algún sitio de importancia para la gente y que así las visitas vuelvan a inundar la zona.

“Kiosko Alcázar, es el nombre que le pusieron mis papás (doña Aida Castro y don Edwin Alcázar, ya fallecido) hace 55 años al tramito que me ha dado de comer toda su vida.

“Mis hermanas y yo, bien se puede decir, nacimos aquí. Llegamos muy pequeñitos y hasta hay fotos donde mis papás nos ponían en una cajita mientras atendían el tramo. Cuando cumplí siete años hice mi primera venta y a partir de ahí siempre ayudé a mis papás, por eso tengo fe que voy a poder continuar con la tradición familiar, no quiero cerrar.

“Aquí me dieron una chambita de cuida carros, pero resulta que un día de estos se metieron a robar en uno de los carros y le robaron hasta el radio, ahora me dicen que tengo que pagar la mitad, o esea, sin plata, con problemas, con facturas y ahora con una deuda.

Javier Alcázar Castro trabaja en el Kiosko Alcázar que es de su familia desde hace 55 años y está en las afueras del antiguo zoológico Simón Bolívar.
En otros tiempos el tramito daba para que don Javier la pasara bien con su familia en lo económico. (Cortesía)

“Esperaré un tiempito, si esto sigue así voy a tener que cerrar, devolver el tramo y ponerme a buscar trabajo, pero ahí está lo jodido, ¿quién le da trabajo a un viejo de 57 años que solo tiene segundo de colegio, que no tiene experiencia en nada más que vender en un tramito toda la vida? Todo se me ha puesto cuesta arriba porque la calle está muy dura”, reconoce con algo de desesperación este pulseador.

Don Javier tiene razón, la calle está durísima, de acuerdo a la última Encuesta Continua de Empleo del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC) para febrero, marzo y abril pasados, este breteador era parte de los 2.150.000 ticos con trabajo, pero muy probablemente, si los números se mantienen parecidos en la encuesta del INEC para mayo, junio y julio, pasará a ser uno de los 185 mil desempleados que tiene el país. De esos 185 mil desempleados que registra el INEC, 103 mil son hombres y 82 mil son mujeres.

Le consultamos a don Javier como en qué le gustaría trabajar si tiene que cerrar su tramito y nos dijo que para la crisis económica que está viviendo, trabajaría en lo que sea: cuidando carros, vendiendo tiliches, lo que sea con tal de ganarse la platica que necesita su familia para salir adelante.

Es muy posible que le toque pulsearla en un bretecito informal, o sea, se sumará a las 820 mil personas en el país que tiene este tipo de trabajo, según el INEC: 501 mil son hombres y 319 mil son mujeres.

”Del total del empleo informal, se calculó que 437 mil personas desempeñaron labores de manera independiente, mientras que 383 mil trabajaron como asalariados o auxiliares familiares”, asegura el INEC.

En el Ministerio de Ambiente y Energía (Minae) todavía no tiene un futuro definido para el terreno donde estaba el Simón Bolívar. La última información del Minae tiene que ver con una limpieza que hicieron.

Javier Alcázar Castro trabaja en el Kiosko Alcázar que es de su familia desde hace 55 años y está en las afueras del antiguo zoológico Simón Bolívar.
Para quienes visitaban el Simón Bolívar comprar algo en el Kiosko Alcázar era parte del viaje. (Cortesía)

“El Minae realizó con apoyo de la Fundación Vásquez un trabajo de limpieza coordinado en las instalaciones del antiguo zoológico Simón Bolívar, luego de que la institución tomó posesión, el pasado 11 de mayo de 2024, de los inmuebles de éste y del Centro de Conservación Santa Ana.

“Según reportes del equipo técnico y legal del Minae, Fundazoo, entregó los sitios en mal estado, con gran cantidad de basura y suciedad”, aseguró el Ministerio en un comunicado el pasado 4 de junio.

Eduardo Vega

Eduardo Vega

Periodista desde 1994. Bachiller en Análisis de Sistemas de la Universidad Federada y egresado del posgrado en Comunicación de la UCR. Periodista del Año de La Teja en el 2017. Cubrió la Copa del Mundo Sub-20 de la FIFA en el 2001 en Argentina; la Copa del Mundo Mayor de la FIFA del 2010 en Sudáfrica; Copa de Oro en el 2007.

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