Las cordales o las muelas del juicio, como se les conoce popularmente, son un dolor de cabeza para algunos pacientes que se quejan de molestias debido a la presión que estas ejercen sobre los demás dientes.
Algunos pacientes evitan el médico y buscan aliviar el dolor tomando pastillas o con remedios caseros; sin embargo, la única forma de corregirlo de forma definitiva es con una cirugía para retirarlas.
Si este es su caso, lo primero que debe hacer es sacar una cita para que el médico valore el estado. Si la muela salió por completo, sacarla será más sencillo, pero si no se ve o está en una posición diferente, lo que le recomendarán es hacerse una placa.
Esto es necesario para averiguar si la muela está cerca de algún nervio que deba ser tratado antes, para así evitar dañar algo.
El médico podría recomendar exámenes de sangre antes de programar la cita de cirugía, pero no se asuste, esto es para asegurar que el paciente no tenga alguna condición que alargue el tiempo de recuperación.
Es importante sacar las cordales, en especial si usted se hizo un tratamiento de ortodoncia porque volvería a correr los dientes y dañar todo lo que se había avanzado.
Estas muelas no son necesarias y eliminarlas le evitará molestias en el futuro y garantizará que sus dientes no se corran.
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