La ansiedad e incertidumbre que algunas personas vivieron en el 2020 ha tenido efectos negativos en muchas personas, a quienes se les apagaron las ilusiones y han sido incapaces de fijarse propósitos para este 2021.
La sicóloga Angie Barboza Chaves explicó que muchas personas se encuentra como en pausa debido a la pandemia y no quieren tomar decisiones por miedo de que se agrave la situación y que sus planes o metas se vean frustrados.
“Somos seres humanos que vivimos en sociedad y plantearnos metas y desarrollarlas siempre va a ser importante. Debemos tener en cuenta que la pandemia pasará y que saldremos adelante, por lo que no es beneficioso quedarse estancado”, explicó la especialista de la UNIBE.
Todas las situaciones que enfrentamos, así sean en época de crisis, son oportunidades para mejorar.
Lo importante es que las metas que se plantee sean realistas y se ajusten a su contexto familiar y social.
“Si ahorita no tiene los recursos para irse a hacer una maestría a España, puede cursar los estudios aquí, o comenzar a buscar una beca que le ayude a alcanzar su sueño sin tener que contar con el dinero. Eso le motivará y permitirá iniciar un proceso de cambio a mediano plazo”, agregó Barboza.
El dinero no es un obstáculo. La sicóloga aclaró que cuando las metas dependen de la chochosca es porque estas no están bien planteadas.
“Si bien es cierto que el dinero es muy necesario, hay muchas oportunidades y la meta no debe ir relacionada con el dinero, puede fijarse una meta de crecimiento profesional o de ser más responsable, más puntual, de tener un crecimiento espiritual, mejorar la relación con la mamá, el hermano o la pareja”, agregó la especialista.
Incluso entre las metas podrían estar dejar un vicio, dejar de decir malas palabras o decidir estar tranquilo.
Además, usted puede plantearse una meta en cualquier momento del año, no debe esperar a que inicie uno para arrancar.
Tome nota
- Haga una pausa y reconozca las emociones. Haga cambios paulatinos. Si quiere cambiar el carro y luego de hacer cuentas ve que no se puede y lo hace, ¿qué beneficio sería eso para usted o su familia?
- No se dé por vencido: Revise cuáles áreas de su vida tiene afectadas: económicas, sociales, físicas, emocionales y piense qué puede hacer para mejorar.
- Defina prioridades: Pregúntese qué necesita y qué tiene que hacer para lograrlo. Todo propósito lleva un proceso.
- Establezca tiempos o límites: Fíjese plazos a corto, mediano o largo plazo, dependiendo de su objetivo.
- Tenga una buena actitud: Todo propósito debe de ir acompañado de una energía positiva, no se ponga excusas.
- Defina una ruta: Si la meta es estudiar, realmente eso es lo que quiere no es por cumplir el sueño de su madre.