Carlos Abarca Coto fue el primer costarricense vacunado contra el covid-19 en Houston, Estados Unidos.
Le pusieron la dosis este 17 de diciembre a las 7 de la mañana hora de Houston, Texas (misma hora tica).
Estados Unidos es el primer país en esta parte del mundo, junto a Canadá, en recibir lotes de la vacuna desarrollada por Pfizer y BioNTech.
El gigante norteamericano es el país más afectado en el planeta, tiene 16.280.842 infectados por coronavirus y 299.370 fallecidos, según la Universidad Johns Hopkins.
“No sentí ni el pinchazo, no sentí nada después, estoy pura vida”, fue lo primero que comentó Carlos, doctor en Finanzas de la Universidad de Houston y quien trabaja desde hace varios años en el Departamento deFinanzas del Hospital de Niños de Texas, por eso estaba en la primera línea estadounidense de las personas a vacunar.
Estaba tan puras tejas después de la vacuna que unas dos horas más adelante se montó en su carro y manejó varios kilómetros sin ningún problema y sin sentir ningún tipo de incomodidad ni el brazo ni en ninguna otra parte.
El consulado tico en Houston hizo ver su alegría por la vacunación. Por medio del cónsul, Herbert Espinoza, dijo: “Felicidades a don Carlos Abarca, primer costarricense vacunado contra el covid-19 en los Estados Unidos, quien recibió la vacuna en su lugar de trabajo.
“Don Carlos nos anima a todos los que no tengamos contraindicaciones a vacunarnos en cuanto se presente la oportunidad de hacerlo para tener bajo control en los próximos meses esta pandemia, que tanto ha trastornado nuestras vidas”.
Aunque está lejos de su tierra natal, el ejemplo de Carlos llega hasta Tiquicia, de la que jamás se olvida.
Ama los tamales
Carlos tiene 44 años y a los dos años dejó Mozotal de Guadalupe para irse con su mamá, Lidilia Coto Solano, a Houston, en donde echaron raíces, pero sin olvidar jamás su amada patria.
Le encanta cocinar y eso lo conectó con Tiquicia. Al aprender no se pudo aguantar y ya es un experto haciendo olla de carne, gallo pinto y todos los diciembres hace tamales al mejor estilo tico, usando hoja de plátano y los ingredientes que conocemos.
Siempre ha amado los deportes, los practicó desde chiquillo, y uno de los que más le gusta es el béisbol, hasta en equipos estuvo.
También le fascina el tenis de campo, por eso ha ido a ver partidos del Abierto de Francia.
No tiene un color definido con los equipos de fútbol de Costa Rica, pero sí tiene la roja bien pegada al pecho. Cuando la Sele juega deja lo que está haciendo para disfrutar los partidos, por eso vivió con gran pasión los dulces momentos de la selección en Brasil 2014.
Bueno para los números
Nos cuenta doña Lidi, como le dicen a la mamá, que Carlos siempre ha sido bien bueno para los números, por eso jamás tuvo problemas en los estudios.
En el 2012 logró su doctorado en Finanzas y la mamá no cabía del orgullo.
“Ha sido un hijo ejemplar, al igual que mis otros dos (Cindy, profesora bilingüe y nació en Guadalupe y James, quien lleva ya 20 años trabajando para la línea aérea United y nació en Houston), salieron muy buenos para el estudio y jamás olvidan sus raíces ticas, aman Costa Rica”, dice doña Lidi.
Carlos jamás se arrancó el ombligo de su patria, viene a cada rato, le encanta irse para el lado de Liberia, Guanacaste, a disfrutar el calorcito y las playas; además siempre aprende algún truco o platillo nuevo.
Y para estar bien y regresar con toda la para fue que se vacunó.
Desde el fin de semana, decenas de camiones y aviones empezaron a distribuir en diferentes zonas de Estados Unidos los lotes de la vacuna contra el covid-19 desarrollada por las farmacéuticas Pfizer y BioNTech.
Centros de distribución ya contaban a inicios de la semana con las primeras dosis que se aplican a la población prioritaria, es decir, trabajadores de la salud y personas de la tercera edad.
Por ahora, en Estados Unidos, los lotes de vacunas se entregarán a 145 centros de distribución, otros 425 sitios adicionales recibirán en los días posteriores.
Ante las amargas cifras de contagio y muerte, el país del norte espera tener vacunadas a unas 20 millones de personas antes de que termine diciembre y a 100 millones antes de que acabe marzo del 2021.