Nacional

Presidente del Colegio de Geólogos: “El daño en Crucitas durará más de 100 años en recuperarse”

El geólogo explica que el mercurio puede matar a una persona, pero no de inmediato, sino con el paso del tiempo

EscucharEscuchar

En toda la zona de Crucitas, en Cutris de San Carlos, habría al menos 80 toneladas de mercurio, producto usado para extraer oro y muy tóxico.

El dato preocupa al presidente del Colegio de Geólogos de Costa Rica, Arnoldo Rudín Arias, por lo peligroso que es dicho metal.

Crucitas se volvió un atractivo para la extracción ilegal de oro a partir del 2015, luego de que la empresa canadiense Industrias Infinito frenara su actividad en medio de un escándalo político, ambiental y judicial. El Tribunal Contencioso Administrativo le puso candado a esa empresa que antes de irse vendió la finca Vivoyet.

En dicha extracción ilegal de oro, que se da desde entonces, se usa principalmente mercurio ya que funciona como un imán al que se pega el oro y así lo pueden sacar más rápido. Pero luego ese material casi siempre lo dejan botado.

Bien grande es el daño ambiental que hay en Crucitas. Foto: Jeffrey Zamora. (Jeffrey Zamora)

Es por eso que don Arnoldo, experto en geología, nos respondió varias consultas:

- ¿Cómo entiendo esas 80 toneladas de mercurio en Crucitas?

Es muy fácil, un toro de esos que se usan en las montas pesa en promedio 500 kilos, o sea, media tonelada, entonces, eso es como tener ahí en esa zona 160 toros de esos. Es demasiado mercurio, hasta yo me asusto. Uno no termina de creerlo.

- ¿Por qué usan mercurio?

Es un metal que trabaja como un imán, entonces el oro, para que nos entendamos, se pega. Así los extractores ilegales de oro, quienes son los que usan mercurio, lo detectan más rápido. Ese mercurio que usan tratan de recogerlo, pero la gran mayoría lo dejan en el suelo, no les importa cuando ya tienen su oro.

- ¿Qué es el mercurio?

Es un metal que a temperatura ambiente es líquido, pero cuando se calienta se evapora y ese vapor es tóxico, invisible y sin olor. También en su estado líquido es tóxico para las personas, puede llegar hasta a matar, pero no al instante, es con el paso del tiempo porque afecta riñones, hígado y la gente no lo siente hasta que ya la afectación es demasiada. El mercurio se queda en el cuerpo de la persona.

Los operativos de la Fuerza Pública confirman que la extracción ilegal del oro sigue. Foto: Cortesía MSP

En el 2018, un informe del Instituto Regional de Estudios en Sustancias Tóxicas de la UNA confirmó la contaminación por mercurio en Crucitas. Ese estudio encontró elevados niveles en muestras de peces, plantas, agua y sedimento que se recogieron dentro y fuera de las zonas afectadas por la actividad minera. Estamos en el 2022, ¿ese mercurio sigue ahí?

Claro. El mercurio se queda en el ambiente. Pasa del suelo a los ríos, de ahí al mar. Los animales, peces y todo tipo de plantas, hierbas y árboles, lo recogen. Eso es un gran problema, por eso me asusto, porque es demasiado mercurio y demasiada naturaleza afectada. Recordemos que la zona de Crucitas tenía y tiene bosques primarios y secundarios. En estos casos el daño ambiental es peor.

- ¿El daño ambiental de Crucitas se combate reforestando?

Digamos que usted le mete un tractor a una zona como del tamaño de una cancha de fútbol, quita todo, la deja en pura tierra. Con el tiempo vuelve a crecer zacate y hasta árboles. Eso mismo podría pasar en Crucitas, pero el mercurio seguirá ahí. Ya la contaminación está. El daño ambiental en Crucitas durará más de 100 años en recuperarse.

- ¿Entonces el daño es irreparable?

Si dejamos Crucitas así, el desastre seguirá porque la explotación irracional no va a parar. Ya el agua de Crucitas no se puede tomar, la contaminación de ríos, animales y flora está. Enfrentamos un desastre natural y el mercurio no se va a ir para ningún lado, al contrario, a como está la explotación ilegal, aumentará.

- ¿Hay solución?

Hay que realizar un cambio en la ley (Código de Minería), que le impide al gobierno la explotación minera para que así se pueda aplicar lo que se conoce como limpieza de pasivos ambientales, o sea, limpiar Crucitas de mercurio, claro hablamos de un costo muy alto en millones de dólares, pero se tiene que hacer, el país no se puede olvidar del daño que hay allí.

Para extraer oro de forma ilegal, usan mercurio y eso daña el ambiente. Cortesía. (oij)

- ¿Hay que meterle mano ya?

De lo que hablo es un tema que no se resuelve de la noche a la mañana, ocupa grandes estudios y grandes esfuerzos país. Se ocupa trabajo serio y hay que empezar ya.

- Hay gente de la Gran Área Metropolitana (GAM) que dice “‘porta’ a mí, esa contaminación es allá muy lejos”, ¿qué piensa de eso?

Nos afecta a todos como país, al final, lo que tenemos es una parte de nuestro país muy contaminado.

- ¿Nos cogió el tren, es demasiado tarde?

No. Estamos a tiempo. El Colegio de Geólogos se pone a la entera disposición del Gobierno para entrarle con todo al tema de Crucitas y la limpieza que se necesita. Este país tiene profesionales muy capacitados que trabajan aquí y en otros países como Canadá, México, Estados Unidos, Nicaragua, Perú, Chile, Ecuador, entre otros, y tienen gran experiencia en la minería responsable. Porque déjeme decirle algo, la minería y el ambiente sí pueden convivir, pasa en Canadá, por ejemplo, pero hay que ser muy responsables.

- ¿Usted cree que en verdad haya tanto mercurio?

No he visto los estudios, pero déjeme decirle algo, para que me entienda, la densidad del agua es uno, o sea, un litro de agua pesa un kilo. En el caso del mercurio la densidad es de 13,5, entonces, las 80 toneladas son 80.000 mil kilos, los cuáles hay que dividir entre 13,5 y eso nos da 5.925 litros de mercurio. Imagínese 5.925 cajas de leche de un litro regadas en Crucitas, tampoco es tan difícil de esconder una, dos, tres y más cajas de leche y pasarlas de países como Nicaragua o México de forma ilegal hasta nuestro país.

Eduardo Vega

Eduardo Vega

Periodista desde 1994. Bachiller en Análisis de Sistemas de la Universidad Federada y egresado del posgrado en Comunicación de la UCR. Periodista del Año de La Teja en el 2017. Cubrió la Copa del Mundo Sub-20 de la FIFA en el 2001 en Argentina; la Copa del Mundo Mayor de la FIFA del 2010 en Sudáfrica; Copa de Oro en el 2007.

En beneficio de la transparencia y para evitar distorsiones del debate público por medios informáticos o aprovechando el anonimato, la sección de comentarios está reservada para nuestros suscriptores para comentar sobre el contenido de los artículos, no sobre los autores. El nombre completo y número de cédula del suscriptor aparecerá automáticamente con el comentario.