El presidente de la República, Rodrigo Chaves, recibió este lunes el que podría ser el golpe más fuerte en lo que lleva de su Gobierno, según opina el politólogo y sociólogo Francisco Barahona.
El experto criticó, sin pelos en la lengua, la reacción del Poder Ejecutivo, por medio de la ministra de la Presidencia, Laura Fernández, quien fue la que dio la cara sobre este tema.
La Fiscalía y el OIJ hicieron 28 allanamientos y detuvieron a ocho funcionarios de la Caja Costarricense de Seguro Social, entre ellos a Marta Esquivel, presidenta de la institución.
El Ministerio Público informó que, al parecer, la Junta Directiva de la Caja se apropió de forma indebida del conocimiento de un concurso público para la administración de 138 Ebais.
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“Se presume que los imputados anularon el procedimiento de compra que estaba listo para ser publicado y en su lugar instruyeron uno nuevo, en el cual habrían ejercido control y, valiéndose de sus cargos, influyeron sobre otros funcionarios para modificar el pliego de condiciones de acuerdo con los intereses de las cooperativas.
“Lo anterior, a pesar de que se determinó que las ofertas presentadas por las cinco entidades eran excesivas, significando un incremento anual de más de ¢12.400 millones respecto al costo actual de la prestación del servicio en las mismas áreas de salud y en igualdad de condiciones técnicas.
“Las autoridades judiciales presumen que miembros de esa junta sostuvieron reuniones con los oferentes, lo cual pudo haber generado una ventaja indebida a estos”, detalló la Fiscalía.
Pese a los datos revelados, Fernández defendió a Esquivel y atacó a la Fiscalía.
“Las acciones de la Fiscalía son absurdas desde cualquier punto de vista legal y moral, abusivas. La acusación primordial es de prevaricato, esto es, tomar acciones ilegales, no significa recibir dádivas, propinas o cualquier otro acto de corrupción.
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“¿Cómo es posible que la Fiscalía argumente que hay prevaricato si la adjudicación del contrato ni siquiera está en firme?, apenas está en revisión de la Contraloría y no se ha pagado un solo colón.
“¿Por qué tanto show cuando esto no tiene ni dos meses de haberse denunciado?, ¿por qué no citaron por escrito a los miembros de la junta directiva y a doña Marta en lugar de detenerlos mediáticamente?, ¿por qué la Fiscalía se movió tan rápido con una base tan débil, haciendo uso de un sensacionalismo tan innecesario?”, dijo Fernández.
Le cuidan la espalda a Rodrigo Chaves
El polítogo Francisco Barahona dijo que el mensaje del Gobierno iba dirigido a quienes apoyan de forma fiel a Chaves, y que no acostumbran cuestionarlo ni a él, ni a sus jerarcas.
“Si la Fiscalía, bajo la autoridad de un juez, tomó la decisión de arrestarla, es por algo; la institucionalidad debe respetarse porque la Fiscalía tiene sus razones y tiene tiempo investigando este tema y no creo que haya actuado precipitadamente ni como dice la ministra, en términos sospechosos contra el Gobierno.
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“Me parece que la ministra se extralimita, la noto prepotente, la noto como que cree que ser ministra de la Presidencia le permite decidir entre el bien y el mal y eso no es así.
“Se ve muy acalorada. Sale ella, no el presidente porque le están guardando la espalda, entre otras cosas porque el presidente también está enfrentando otra acusación por lo de Parque Viva, también muy delicada, sobre todo porque hay una resolución de la Sala IV en contra de la gestión del presidente... Solo le faltó tener una trompeta, a la señora ministra, para llamar a la guerra”, agregó el experto.
Barahona dijo que el presidente está pasando por momentos muy difíciles, porque se está viendo como la propia institucionalidad, a través de estas denuncias, está investigando al Gobierno y eso él no se lo esperaba.