Traicionado, así es como se siente don Roger Barquero Ramírez tras haber sido despedido de su trabajo como chofer en el Sistema Nacional de Radio y Televisión (SINART), mejor conocido como canal 13, empresa a la que le dedicó más de 20 años de su vida.
Don Roger forma parte de las 18 personas que fueron despedidas la mañana de este miércoles luego de que en una sesión realizada la noche de este martes 17 de diciembre el Consejo Ejecutivo del SINART decidiera cesar sus servicios con responsabilidad patronal.
“Lo que siento es frustración, a los que hoy (miércoles) nos dieron la carta de despido creemos que no nos lo merecemos, que no es justo, la situación pésima, la situación grave que tiene el SINART no la provocamos nosotros, esa situación la provocó la misma administración, entonces es muy fácil, como decía mi madre, que en paz descanse, que paguen justos por pecadores”, dijo Barquero.
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Don Roger no podrá disfrutar de la Navidad ni la celebración de Fin de Año como lo esperaba, pues ahora lo único que siente es preocupación por encontrar un nuevo trabajo que le permita cumplir con los pocos años que le hacían falta para pensionarse.
“Es totalmente frustrante, yo estoy a cinco años de pensionarme, con 60 años encima tengo que salir y buscar empleo, no es fácil para mí, cuando le he dado 20 años de mi vida al SINART, cumpliendo con horarios, trabajando más horas de las ordinarias y ahora de repente dejé de servir en el SINART, ya no soy necesario, pasé a ser un trabajador que hay que despedir porque la situación así lo amerita, situación que ellos mismos provocaron”, destacó.
Gerardo Sequeira, presidente de Seccional ANEP-SINART, confirmó a La Teja que las personas despedidas son siete choferes, nueve secretarias, un mensajero, y la encargada de la caja chica de la Tesorería, esto según la entidad como parte de un proceso de reestructuración.
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Los toma por sorpresa
Sequeira dijo que la decisión de despedir a los 18 funcionarios los tomó por sorpresa, pues literalmente fue una decisión de la noche a la mañana, en la que a los afectados únicamente se les entregó una carta para notificarles el despido con responsabilidad patronal, indicando que quieren optimizar los recursos de la empresa.
“El ambiente imagínese cómo puede de estar, en estas fechas que le notifiquen a una persona del despido es inhumano, es cruel, nosotros lo consideramos así. Como seccional de ANEP en el SINART consideramos que son actuaciones arbitrarias de parte de la presidencia ejecutiva, aquí con toda vehemencia señalamos como responsable al señor Fernando Sandí Chacón, presidente ejecutivo de la institución, de actuar de manera arbitraria y consideramos que incluso hasta violentando principios legales”, dijo Sequeira.
Pagaron los platos rotos
Para el representante de ANEP-SINART no es ningún secreto que la situación financiera de la institución se encuentra en una condición crítica, pues arrastra un déficit de ¢750 millones, lo que no ven justo es que tengan que ser los trabajadores los que paguen los platos rotos por esa situación.
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“La situación del SINART es bastante crítica porque las finanzas efectivamente no están sanas, pero eso obedece a una mala gestión desde la presidencia ejecutiva, a nuestro criterio. El señor Fernando Sandí Chacón no ha gestionado un plan para reactivar la producción del SINART, del canal 13, de la Radio Nacional, su caballo de batalla son los medios digitales y la verdad que también ha quedado a deber en ese campo. Dada su incapacidad para gestionar el SINART correctamente alega que es insostenible, porque él mismo lo sumió en una parálisis”, destacó Sequeira.
Decisión no podía esperar
Ante la consulta hecha por este medio, Fernando Sandí, presidente ejecutivo del SINART, se refirió a los despidos por medio de un comunicado de prensa, en el que indicó que la situación financiera es tan crítica que existe la posibilidad de que no lleguen a finales del 2025 a menos de que tomen decisiones.
“Esta decisión, tan lamentable como impostergable fue tomada con fundamento en el mayor respeto y la protección laboral de todos los colaboradores que hoy nos dejan (...)Para finalizar, reconocemos que esta decisión se toma en una época especialmente sensible, pero reiteramos que no era posible posponerla”.