EscucharLa inteligencia artificial (IA) ya es parte de la vida cotidiana y ahora que se acercan las elecciones presidenciales, más de uno se frota las manos pensando en todas las cosas, no tan buenas, que podría hacer con esta tecnología.
La IA permite hacer montajes de fotos, voces, videos y otro montón de cosas que podrían usarse para hacer campaña sucia durante la contienda electoral.
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Precisamente, para evitar eso, la diputada Vanessa Castro, del Partido Unidad Social Cristiana (PUSC), en coordinación con el Tribunal Supremo de Elecciones, presentó un proyecto de ley para limitar el uso de la IA en campaña y que pone unas multas millonarias a quienes se pasen de listos.
En la iniciativa se detalla que se permitirá el uso de inteligencia artificial en la generación de contenido propagandístico, pero que cualquier contenido visual, auditivo o gráfico creado con IA y utilizado con fines de propaganda electoral, deberá incluir una advertencia que informe a los electores sobre su origen.
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“La implementación de este proyecto de ley responde a la necesidad de regular el uso de la inteligencia artificial en los procesos electorales costarricenses, asegurando que su aplicación contribuya a fortalecer la democracia y no a debilitarla.
“La normativa propuesta permitirá prevenir la desinformación, evitar la manipulación de la opinión pública y garantizar que las campañas políticas se desarrollen en un marco de transparencia y equidad”, detalla la justificación del proyecto.
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El texto prohíbe el uso de IA para:
- Crear, modificar o manipular, sin consentimiento del titular, la imagen, voz o cualquier otro rasgo vinculado a los derechos de la personalidad de cualquier persona con fines político-electorales, incluyendo la generación de deepfakes o la alteración de declaraciones públicas con el propósito de engañar al electorado.
- Utilizar perfiles automatizados o sistemas para simular interacción humana con el objetivo de enseñar al electorado, manipular tendencias de opinión o generar actividad que afecte la equidad del concurso electoral.
- Utilizar los datos sobre las preferencias y pensamiento de las personas, como estrategia publicitaria, para diseñar y dirigir contenidos específicos.
- Utilizar IA para generar contenido contra la confianza en la integridad del proceso electoral y en la imparcialidad de las autoridades electorales.
Las personas que incumplan alguna de estas reglas recibirán un castigo que será una multa de diez a cincuenta salarios base. Un salario base es de ¢462.200, lo que quiere decir que las multas irían desde los ¢4.622.000 a los ¢23.110.000.
