EscucharEl Partido Liberal Progresista (PLP) está viviendo días para el olvido.
Primero, las diputadas Johana Obando y Cynthia Córdoba se separaron del partido, declarándose independientes, luego de asegurar que, desde hace meses, se sienten apartadas constantemente en la toma de decisiones y en la gestión interna de la fracción del PLP.
Pero la salida de estas dos legisladoras fue solo la punta del iceberg, ya que, en las últimas horas, un total de 39 personas también renunciaron al partido.
A través de una carta dirigida al Tribunal Supremo de Elecciones (TSE), quienes abandonan la agrupación, entre los que hay síndicos, regidores y hasta concejales, todos de la provincia de Cartago, explican que la diputada Obando era la única que respaldaba “las bases partidarias en la provincia de Cartago”.
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Añaden que por la falta de respaldo hacia su labor y por la falta de transparencia en temas medulares, renuncian de manera irrevocable.
Entre quienes renunciaron al partido también están Alonso González, alcalde de Bagaces, y su vicealcalde, Diego Vega.
Crisis
Por su parte, Eli Feinzaig, uno de los tres diputados que le quedan al PLP y cabecilla del partido, salió a calmar las aguas admitiendo que, si bien se encuentran en un momento de crisis, el partido aún sigue vivito y coleando.
“Los escollos en el camino nos ayudan a crecer, nos obligan a repensar y, como decía Albert Einstein, en la crisis es donde crece la invetiva, donde crecen las grandes estrategias.
“Estamos en una situación en la que la salida de dos diputadas conlleva a que otras personas renuncien al partido. El partido; sin embargo, está más vivo que nunca”, aseguró.
Incluso, agregó que los últimos fines de semana los ha pasado muy ocupado con varias giras y asambleas cantonales.
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“Seguimos adelante. De los problemas aprendemos, repensamos y definimos un nuevo camino para seguir para adelante”, añadió.
Ahora, es importante recordar que esta no es la primera renuncia masiva que vive el PLP, en enero de este año otras 12 personas salieron del partido, entre ellas la extesorera del partido, Laura Álvarez, quien aseguró que Feinzaig concentra el poder de decisión, lo que restringe los espacios para liderazgos alternativos.
