Los choferes que pasaron este jueves por la mañana sobre el puente Juan Pablo II en La Uruca, se llevaron un tremendo susto ya que los hules que protegen a las placas metálicas, que unen a la estructura, se desprendieron y por eso los picos de metal quedaron expuestos.
Una situación que también puso a correr a las autoridades de Tránsito.
Esto obligó a cerrar el paso en el sentido San José - Alajuela, mientras las cuadrillas del Conavi echaban una capa de asfalto para tapar los peligrosos picos metálicos que amenazaban con pinchar llantas y provocar una desgracia mayor.
La misma acción se repitió en el lado contrario a eso del mediodía, ya que en el sentido Alajuela - San José también había metal sin protección.
Como es de esperarse, esto provocó presas en ambos sentidos, uno por las reparaciones y el otro por el efecto mirón de los conductores que querían ver qué estaba pasando.