Zara Rutherford, piloto belga de 19 años y que le dará la vuelta al mundo, le hizo una pequeña variación a su ruta solo para pasar por Costa Rica.
De lograr su cometido, la joven ganará el récord Guinness a la mujer de menor edad en darle la vuelta a la Tierra en un avión ultraligero (dos asientos), sin que nadie la acompañe, título que le pertenece a la estadounidense Shaesta Waiz, quien lo ganó en octubre del 2017, con 30 años.
Inicialmente el mapa de Rutherford incluía a Groenlandia, Honduras, Arabia Saudita, Birmania, Canadá, Estados Unidos, entre otros y Tiquicia no estaba entre sus planes.
Sin embargo, cuando don Carlos Vargas, presidente de Aerodiva, se dio cuenta de la iniciativa de la valiente muchacha, la contactó y la invitó a que pasara por el país y ella muy amablemente aceptó incluirnos en su viaje.
“Vimos en Zara un mensaje de motivación y positivismo que quisiéramos compartir con toda Costa Rica en la celebración de nuestros docientos años de independencia, es nuestro regalo como compañía al país”, manifestó Vargas muy contento.
Se espera que Zara llegue al país el lunes 6 de setiembre a las 9:30 a. m., de momento no ha sufrido ningún retraso, pero mucho depende del clima, por lo que no se descarta que pudiera llegar el martes 7 o, incluso, el miércoles 8 de setiembre.
La piloto, como una muestra de cariño y agradecimiento, hará un rápido vuelo a baja altura por el Juan Santamaría, en Alajuela y de ahí se irá al aeropuerto Tobías Bolaños, en Pavas, donde dará una conferencia de prensa en el hangar 85.
También se reunirá con mujeres ticas que estudian o trabajan en aviación, además, almorzará con costarricenses destacadas en ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas.
Ella cerrará su participación en el país mostrándole su avión a organizaciones de pilotos en horas de la tarde y, si el clima lo permite, a las siete de la mañana del otro día volará hacia Tapachula, México, para continuar su travesía.
“Realmente espero con esta vuelta al mundo motivar a las niñas y mujeres jóvenes a ingresar a la aviación, la ciencia, la tecnología, la ingeniería y las matemáticas. Al crecer, no vi a muchas mujeres en estos sectores y fue bastante triste”, expresó Zara, quienes mitad belga y mitad inglesa, el pasado miércoles 18 de agosto, día que arrancó el viaje.
Sin límites
Además de cumplir este sueño, Zara quiere ser astronauta. Ya el mundo entero volvió los ojos hacia esta animada joven que, si cumple la meta, habrá volado 51 mil kilómetros, haciendo paradas en 51 países de los cinco continentes.
“El mayor reto serán los lugares muy despoblados como el norte de Rusia o Groenlandia; no hay mucha gente que viva allí, así que, si algo saliera mal, estaría en una situación un poco incómoda”, dice la aventurera, a quien se puede seguir en tiempo real en: https://flyzolo.com/
Bien se puede decir que Zara nació en una cabina de avioneta, porque a los cuatro meses sus papás la montaron en una y la llevaron a volar.
Ella trae lo de piloto en la sangre, en su ADN, es algo que vive a diario desde sus primeros días de vida porque es de una familia de pilotos y eso le ha permitido, con tan solo 19 años, haber volado ya varios tipos de naves.
— El piloto, hombre, de menor edad en darle la vuelta al mundo se llama Travis Ludlow y tenía 18 años, eso fue en julio de este año.
“Estuve en la cabina de una avioneta unos meses después de nacer y también he estado viajando en avionetas desde que tenía seis años a lugares lejanos alrededor del mundo. Fui a hacer paracaidismo a los once años y piloteé un avión a los catorce”, recordó.
LEA MÁS: Conozca a Alyssa, la adolescente de 17 años que irá a Marte
El avión en que viaja es muy pequeñito para un sueño tan grande: un ultraligero Shark UL, fabricado en Eslovaquia y solo pesa 325 kilos.
Zara no quiere hacer paradas en los aeropuertos grandes del mundo, por el contrario, prefiere llegar a los que tengan menos vuelos al día, eso sí, no pudo evitar el JFK de Nueva York. Prefiere llegar por las noches y así echar combustible para poder seguir rapidito con su ilusión.
Ella estará sola en cada viaje que haga y sus vuelos durarán entre cinco y seis horas. Como parte de la preparación le fabricaron un traje especial para cuando vuele por las zonas árticas y también entrenó muchas veces cómo salir del avión en caso de caer al mar.
Como parte de las precauciones, lleva un teléfono satelital y una radio para poderse comunicar con los controladores aéreos de todos los lugares a los que llegará.
Si bien la cabina es de dos asientos, en el segundo va su maleta y lo único que la acompaña, como ella dijo, es la música que lleva. Hay un equipo de trabajo que la apoya en todo, pero está en Bélgica, sobre todo con el tema de los permisos aéreos para poder aterrizar.
Con un pequeño vuelo desde la ciudad donde nació, Flandes en Bélgica, cruzando el Canal de la Mancha y hasta la costa de Inglaterra, comenzó este viaje al mundo.
Ya Zara cruzó el océano Atlántico y este 2 de setiembre estuvo en Estados Unidos.
— Parada 23. San José será la ciudad número 23 en que aterriza, en su día 19 de viaje. Hasta ese momento, habrá recorrido poco más de 15.000 kilómetros, partiendo de Bélgica y visitando Inglaterra, Escocia, Islandia, Groenlandia, Canadá, Estados Unidos, las Bahamas, Islas Turcas y Caicos, Islas Vírgenes Británicas, Colombia y Panamá. Espera regresar al lugar de donde salió en Bélgica a inicios de noviembre, viajando por Alaska, Asia, Medio Oriente y África.