No sería raro que en Italia alguien preguntara, muerto de risa, "¿La Chorotega?", "¿Alajuelita?" "¿Eso dónde queda?".
La misma pregunta pudo haberse escuchado en inglés, francés y hasta en mandarín porque, aunque usted no lo crea, la rifa de un chancho puso a La Chorotega y a Alajuelita en el mapa mundial.
La rifa trascendió el 10 de agosto, cuando La Teja informó que la curiosa acción era cierta.
Ya la imagen andaba por WhatsApp desde días antes, porque la gente primero se moría de risa con la ocurrencia del premio y se preguntaban si era real.
Pues sí, no era una broma, el primer premio era un chancho sin una pierna; el segundo una pierna de cerdo y el tercero una botella de ron.
Esa ocurrencia, que nació de la cabeza de Alonso Salinas, sin ninguna mala intención, alcanzó la viralidad con la que muchos sueñan.
Del chancho sin pierna se habló en todo el mundo, pero lo mejor de todo es que de La Chorotega, un barrio de clase media baja, se sigue hablando en la actualidad.
Se dio tanto a conocer que eso le permitió a Salinas, en conjunto con la Asociación de Desarrollo de la localidad, hacer otra rifa idéntica en noviembre y los dos talonarios que se sacaron a la venta se vendieron más rápido que un estornudo.
Toda la platica que se recolectó en la primera y segunda rifas es para beneficio de la comunidad, sobre todo pensando en el bien de los niños de "La Choro".
La primera sirvió para recolectar plata para construir un planché donde los pequeños puedan espantar las drogas jugando y la segunda, para hacerles una fiesta de Navidad a esos mismos chiquitines que, en algunos casos, esa es su única celebración en estas épocas.
"Para mí la rifa significó el esfuerzo de un joven que quiere ver a su comunidad diferente, que con algo tan sencillo traspasara fronteras y que se enorgullece no de él, sino de un simple hecho para un bien social", nos dice Alonso Salinas, presidente de la Asociación de Desarrollo de La Chorotega.
Toda una tradición
Fue tanto el alcance que tuvo la rifa que Salinas espera que esta pueda convertirse en una tradición que caracterice a su barrio.
"Esto sin la rifa jamás hubiera sido posible porque la gente no invierte en Alajuelita, pero nosotros tenemos la culpa porque la misma gente que vive aquí no se la cree y nosotros tenemos demasiada riqueza, tanto en las personas como en las bellezas naturales. Esa cruz hay que explotarla, esas montañas, tenemos identidad con el chinchiví, con el Cristo Negro", sueña Salinas.
Puso tanto en el mapa a La Chorotega el simpático chanchito que en estos días, Mercedes Peñas, la primera dama de la República y esposa del presi Luisgui, contactaron a Alonso para conocer el proyecto que están trabajando. ¡Qué manera!