Esta Semana Santa nos ha dejado una imagen demasiado tierna y que desde ya le está dando la vuelta al mundo y tiene que ver con un perrito y con “Jesucristo”.
Les contamos que, durante las procesiones de la Semana Mayor, según se explica en Sumpango, Sacatepéquez, Guatemala, específicamente durante la procesión en la cual Jesús es azotado, golpeado y obligado a cargar con su cruz rumbo al monte Calvario, los fieles católicos quedaron impactados.
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Resulta que había un perrito callejero que venía siguiendo muy de cerca la procesión. El peludito no le perdió detalle a Jesús y veía cómo los romanos le pegaban y empujaban.
En una de las caídas de quien representaba a Jesús, el perrito no aguantó más y se metió a cuidarlo, se puso a la par del Jesús y le demostró gran cariño porque los humanos le estaban haciendo daño.
El perrito le hizo entender a Jesús que no estaba solo a pesar del desprecio de la gente, de seguro es algo parecido a lo que él siente por ser un peludito de la calle que día con día lucha contra el desprecio de la gente.