Pequeños arroceros de Guanacaste, las zonas Huetar Norte, Pacífico Central y Sur, se presentaron este 9 de noviembre, al Tribunal de Apelaciones de los Contencioso, Administrativo y Civil de Hacienda en Calle Blancos para demandar al presidente Rodrigo Chaves.
Estos arroceros aseguran que las políticas agrícolas que Chaves está aplicando los tiene al borde de la ruina y por eso esperan que, usando la vía judicial, se frenen esas decisiones que tomó el mandatario.
De acuerdo a lo que explican, Chaves los esta haciendo pelear una guerra contra el mundo “de león suelto contra ternero amarrado”, porque bajó los impuestos que se cobran al arroz importado al tiempo mientras que ellos no reciben ninguna ayuda del estado.
Recuerdan que en otros países, los pequeños agricultores tienen varias ayudas del estado y cuidan que la producción de ellos se venda toda.
Los productores aseguran que la llamada ruta del arroz propuesta por Chaves es nada más y nada menos que la tumba para la gran mayoría de pequeños y medianos productores porque al presidente bajarle los impuestos al arroz importado, ellos no van a poder competir con los precios de países como Estados Unidos, Uruguay o Brasil, por ejemplo.
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“Todo lo contrario, vemos la compra de arroz por parte del PAI/CNP con grandes problemas presupuestarios por la aplicación de la Regla Fiscal. Ya hay productores de la Región Chorotega a los que se les ha rechazado la compra de arroz, pero, además, se ha fomentado un trato discriminatorio entre productores ya que, los que logran colocar en el PAI/CNP, están recibiendo mayor remuneración que el resto que no lo logra y además el PAI tiene una capacidad limitada de compra que ya están por superar”, aseguró Wendy Vargas, presidenta de la Asamblea Nacional de Productores.
Actualmente, por la invasión de Rusia a Ucrania, el precio mundial de los granos, incluido el arroz, está muy alto, sin embargo, aseguran los arroceros, en el momento en que el precio internacional baje, la gran mayoría de arroceros ticos desaparecerá, de hecho, aseguran que ya están desapareciendo porque aquel que sembraba 30 hectáreas está ahora sólo sembrando la mitad.
En el país hay unos 500 agricultores que siembra arroz, ellos reconocen que si no cambian las políticas actuales del presidente Chaves, para finales de diciembre quedará sólo la mitad y para el 2023 desaparecerá el resto, quedando solo importadores grandes que serán los dueños de todo el sector y serán quienes pongan a su antojo el precio que el país deberá pagar por cada kilo de arroz.