Cada día es más común ver como los choferes se pelean en carretera: se gritan, se amenazan, se golpean los vehículos, se pegan entre ellos y en ocasiones la situación se vuelve aún más grave al punto de que uno mata a otro.
Los diputados consideran que hay un vacío en la legislación porque actualmente la Ley de Tránsito no considera ni sanciona actos como peleas o agresiones entre conductores o sus pasajeros, pero eso podría cambiar pronto.
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El diputado Fabricio Alvarado, de Nueva República, presentó un proyecto de ley que tiene como fin regular ese tema y hasta pone multas de ¢280 mil a los choferes malamansados que se agarren en la calle.
La iniciativa es clara en que muchas veces las malacrianzas de los conductores terminan ocasionando más presas de las que ya hay, algo que tampoco se toleraría más si se aprueba esta ley.
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La propuesta de ley establece que en caso de que los conductores involucrados en actos violentos en las carreteras desobedezcan al Tránsito cuando se le solicite movilizar su vehículo, se procederá al retiro de placas.
Por otra parte, se propone que las autoridades de Tránsito podrán detener a los conductores, peatones, pasajeros y cualquier otra persona que impida, obstruya o dificulte el tránsito vehicular o el movimiento de los peatones debido a su participación en actos violentos y se niegue a acatar la orden de las autoridades policiales de movilizar el vehículo.
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“La violencia vial se manifiesta a través de diversas conductas agresivas, como el exceso de velocidad, la conducción temeraria, los insultos entre conductores. Estas acciones no solo generan accidentes de tránsito, sino que también contribuyen a un clima de hostilidad y estrés que afecta a todos los usuarios de las carreteras.
“Dichas conductas también pueden llegar a causar congestionamiento vial, con los efectos por todos conocidos, desde consecuencias fatales como una ambulancia que lleve a un paciente en estado crítico, un camión de bomberos con un llamado para ir a detener un incendio, la llegada tardía de un niño que va camino al centro educativo, o un conductor que deba llegar a su lugar de trabajo, entre otras situaciones posibles”, se señala en la justificación de motivos de la propuesta de ley.