¿Habrá alguna casa con karaoke donde no se cante “Cosas del amor” de Ana Gabriel y Vikki Carr?
Es casi imposible, es de la preferidas y siempre hay dos primas, tías, hermanas, madre e hija que se tiran a pista en dúo.
Sin embargo, la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) le dice a todos que si se van a reunir en Navidad, no se vale cantar en parejas en los karaokes familiares.
La primera gran recomendación que hace la Caja es que evitemos del todo los karaokes porque son una fuente de contagio, pero si en estas épocas no pueden contener ese vocerón, parecido al del Buki o al de Amanda Miguel, lo mejor es que se manden solitos.
Doctora musical
En Tiquicia el apellido Guzmán es sinónimo de música, composición y buen cantar. Y es que, ¿quién no se deshace en sentimiento cuando escucha el Soy tico? del artista nacional Carlos Guzmán.
Pues Guzmán tiene un hermano que se llama Manuel Enrique, quien también es artista y él es el papá de la doctora Guiselle Guzmán Saborío, médica especialista en epidemiología de la Caja y con quien hablamos porque es experta en ambos temas.
La doctora Guzmán, de 44 años, ingresó a la institución en 2003, es decir, tiene 17 años de servicio a la población nacional.
Además es la jefa del área de salud colectiva de la Caja y forma parte del equipo del Centro de Coordinación de Emergencias de la institución, por lo que eso, más la herencia musical que tiene la hacen ser la apropiada para opinar.
“En estos días de pandemia y de época navideña me preocupa, profundamente, la salud de los costarricenses. Como conocedora del comportamiento de las personas es que quiero apelar a la conciencia y responsabilidad de los ticos, para que de manera individual se responsabilicen del cuidado y de la seguridad de cada uno”, expresó la doc.
Ella considera que durante los karaokes las personas se emocionan y se olvidan de las buenas prácticas que deben prevalecer en todo momento.
“Cuando la gente canta expulsa gran cantidad de gotitas de saliva que pueden caer hasta diez metros de distancia y contaminar alimentos, superficies y el mismo micrófono. Sí la persona que expulsó la saliva está positiva por covid-19 (aunque parezca estar sana) eso sería catastrófico para los presentes, sobre todo si se mezclan unas familias con otras”, expresa Guzmán.
Estas son las reglas para karaokear en tiempos de pademia: Se debe hacer en un espacio abierto y lo más amplio posible, quien canta no puede acercarse a menos de 1,8 metros de los que escuchan, el micrófono debe forrarse con plástico y limpiarlo cada vez que se cambia de artista (cantante).
Es importantísimo que no se nos olvide que quienes van a cantar deben usar mascarilla para reducir la cantidad de gotitas que pueden esparcirse en el aire mientras cantan. De igual forma todos los participantes y asistentes deben usar la mascarilla en todo momento.
Además, los cantantes deben estar donde el viento vaya en dirección contraria a la de los invitados o separados con una barrera física, siempre guardando la distancia.
Fiebre va a respetar
Una karaokera de la pura cepa, quien antes de la pandemia andaba en cuanto bar con karaoke había en San José, es la modelo Paola Ramírez, quien nos confirma que “Cosas del amor” es una de las consentidas de la gente, de hecho, a ella le encanta y le duele mucho que no va a poder tirársela en diciembre con su esposito, Wilmis Troestch, porque les sale casi perfecta.
“Yo no puedo vivir sin karaoke, es tanto así que, en mayo pasado, en media pandemia, no soporté más y me compré uno para poder cantar en mi casa con mi esposo, quien canta muchísimo.
“No hacer dúos en karaoke la verdad lo vamos a respetar, pero nos duele mucho, nosotros somos de cantarnos casi todas las de Pimpinela, nos encanta “No me ames” de Jennifer López y Marc Anthony, en fin, amamos los dúos. Entendemos el momento que vivimos y vamos a respetar totalmente, nada de parejas, hay que cuidarse mucho”, explica Paola.