Un estudio de la universidad de Oxford reveló nuevos detalles sobre las secuelas que enfrentan las personas que se contagian de covid-19.
El medio de comunicación El País de España, informó que para hacer la investigación los científicos recogieron información la clínica en bases de datos de 1,28 millones de personas con covid, la mayoría de Estados Unidos, pero también de España, Australia, Bulgaria y Malasia, entre otros países. Y los cruzaron con un grupo formado por otros tantos participantes que habían tenido otras infecciones respiratorias.
LEA MÁS: (Video) Así fue la discusión de las diputadas Pilar Cisneros y Dinorah Barquero en el plenario
Los investigadores encontraron que, por edades, los perfiles y riesgos de desarrollar algunas dolencias cambiaban dentro de los propios adultos y también con respecto a los niños.
Por un lado, los adultos menores de 64 años tenían más riesgo de niebla mental o dolencias musculares en comparación con aquellos de su mismo rango de edad que sufrieron otras infecciones respiratorias. En los más ancianos, se veía una mayor incidencia de niebla mental (efectos mentales y cognitivos persistentes), demencia y trastorno psicótico respecto al grupo control.
LEA MÁS: ¿Qué opina la Iglesia de la cremación y esparcir las cenizas de los muertos?
En cuanto a los niños, si bien el riesgo de diagnósticos siquiátricos era más bajo que en adultos, tenían más posibilidades de sufrir un trastorno psicótico o convulsiones en los dos años posteriores a la detección de la covid.
“Los niños tienen tres veces más riesgo de desarrollar trastornos psicóticos y tienen dos veces más riesgo de epilepsia o convulsiones”, detalla el estudio.
A propósito de la ansiedad y los trastornos del ánimo, los menores no tuvieron un mayor riesgo en ninguna etapa tras superar el covid en comparación con los chiquitos que sufrieron otras infecciones respiratorias. La niebla mental también fue “transitoria” y no aumentaba a los dos años.
El estudio afina un poco más sobre las secuelas persistentes que llevan a desarrollar ciertas dolencias, pero deja también otras cuestiones aún por resolver. Por ejemplo, ¿por qué sucede?
En los niños, presumen los expertos, las secuelas podrían ser impulsadas, en parte, por una especie de inflamación que queda después del contagio, como la encefalomielitis (una inflamación en el encéfalo), como se sugirió en un estudio de 52 niños hospitalizados con covid.
Esto apoya las observaciones de un mayor riesgo de encefalitis solo en niños y una tasa más alta de epilepsia o convulsiones poscovid en niños.